El expresidente Donald Trump sufrió en el transcurso de 24 horas tres reveses judiciales en sus intentos por anular los cargos en dos de los juicios criminales en su contra y de demorar el inicio de otros de ellos.
Los jueces Scott McAfee del Tribunal Superior del condado de Fulton en Georgia, Aileen Cannon del Tribunal Federal de Distrito para el Distrito Sur de Florida y Juan Merchán de la Corte Suprema de Nueva York en el condado de Nueva York rechazaron las mociones de los abogados de Trump para anular el juicio por intentar revertir el resultado de las elecciones presidenciales en Georgia, el manejo ilegal de documentos confidenciales de la Casa Blanca y de retrasar el inicio del juicio sobre los pagos secretos a la actriz porno Stormy Daniels, respectivamente.
McAfee dijo Trump no es juzgado por lo que dijo sino por lo que hizo
La acusación emitida en agosto por un gran jurado del condado de Fulton levantó cargos contra Trump y otras 18 personas por participar en un plan de amplio alcance para intentar anular ilegalmente las elecciones presidenciales de 2020 en Georgia después de perder el estado ante el entonces candidato demócrata Joe Biden.
Los abogados de Trump argumentaron que todos los cargos en su contra involucran un discurso político que está protegido incluso si termina siendo falso.
McAfee escribió que en esta etapa previa al juicio debe considerar el lenguaje de la acusación desde una perspectiva favorable a los fiscales. Los cargos no sugieren que Trump y los demás estén siendo procesados simplemente por hacer declaraciones falsas, sino más bien que actuaron intencionalmente y a sabiendas para dañar al gobierno, escribió.
“Incluso los discursos políticos centrales que abordan asuntos de interés público no son impenetrables para el procesamiento si supuestamente se utilizan para promover actividades delictivas”, escribió el juez.
El juez añadió que incluso actos legales que involucran expresiones protegidas por la Primera Enmienda pueden usarse para respaldar un cargo bajo la ley contra el crimen organizado de Georgia, que el equipo de la fiscal Fani Willis utilizó en este caso.
McAfee sí dejó abierta la posibilidad de que Trump y otros pudieran plantear argumentos similares “en el momento apropiado después del establecimiento de un expediente sobre los hechos”.
La orden de McAfee se hace eco de un fallo anterior en el caso de interferencia federal en las elecciones contra Trump presentado por el fiscal especial del Departamento de Justicia Jack Smith. La jueza de distrito estadounidense Tanya Chutkan escribió en diciembre que “está bien establecido que la Primera Enmienda no protege el discurso que se utiliza como instrumento de un delito”.
Aún no se ha fijado una fecha para el inicio del juicio en el extenso caso de Georgia, uno de los cuatro procesos penales que tiene pendientes Trump, quien busca regresar a la Casa Blanca, aunque Willis ha pedido que el juicio comience en agosto. Cuatro de los 18 coacusados iniciales se declararon culpables tras llegar a acuerdos con los fiscales. Trump y los acusados restantes se declararon inocentes.
Cannon rechazó la moción, pero no la teoría legal que la sustenta
Cannon por su parte, decidió no desestimar los cargos contra Trump en el caso del presunto manejo ilegal de los documentos clasificados de la Casa Blanca hallados por el FBI en su residencia particular en Florida. Trump había argumentado que los cargos debían ser retirados ya que como presidente tenía autoridad para llevar consigo documentos clasificados o sensibles al abandonar la Casa Blanca.
En una breve orden, Cannon mantuvo los cargos pero dejó abierta la posibilidad de que abogados de Trump puedan usar el argumento para defenderlo durante el juicio. La orden de Cannon rechazó la solicitud del fiscal especial Jack Smith para que tomara una decisión final sobre si la teoría puede usarse en el juicio para que los fiscales pudieran apelarla, diciendo que tal petición era “injusta y sin precedentes”.
Cannon aún tiene en sus manos varias mociones pendientes por decidir, incluidas varias otras solicitudes de los abogados de Trump para desestimar el caso.
Merchán duda de la sinceridad y el propósito real de la moción de Trump
Después de la controversial expansión de la orden mordaza contra el expresidente Trump a principios de la semana, el juez Merchán, quien preside el caso penal en contra de Trump por el supuesto mal manejo de los fondos de campaña en el pago secreto a la actriz porno Stormy Daniels, negó el miércoles un intento de última hora del expresidente para posponer el juicio hasta que la Corte Suprema decida la apelación sobre la teoría de la “inmunidad presidencial” alegada en el caso federal por interferencia electoral.
En su decisión, Merchán dijo que Trump esperó demasiado para solicitar el aplazamiento y tratar de evitar que los fiscales utilicen algunas de las pruebas que pretenden presentar en el juicio, lo que según el juez “plantea preguntas reales sobre la sinceridad y el propósito real de la moción”.
La selección de jurados en el caso está programada para el 15 de abril, mientras que la Corte Suprema comenzará a escuchar los argumentos orales sobre la supuesta inmunidad presidencial alegada por Trump el día 25 del mismo mes.
“Este Tribunal determina que el acusado tuvo innumerables oportunidades para presentar el reclamo de inmunidad presidencial mucho antes del 7 de marzo de 2024”, escribió Merchán.
Con información de The Associated Press.
Familiares de hispana asesinada en Michigan niegan que Trump haya hablado con ellos: “Desinforma a la gente”
