El Departamento de Seguridad Nacional de Estados Unidos (DHS, por sus siglas en inglés) pidió a un ciudadano estadounidense de raíces latinas abandonar el país. Lo anterior ha desatado preocupación entre organizaciones defensoras de los derechos civiles.
El afectado es Adam Peña, abogado de profesión, nacido en California y ampliamente reconocido por su labor en defensa de comunidades migrantes en el condado Imperial, ubicado junto a la frontera con Baja California. Durante más de una década ha participado activamente en asociaciones que promueven los derechos de migrantes y poblaciones vulnerables.
Esto podría sentar un precedente peligroso para ciudadanos estadounidenses con raíces latinas
El incidente ocurrió luego de que Adam recibiera una notificación del Student and Exchange Visitor Program (SEVP) —programa que supervisa a estudiantes extranjeros—, donde se le solicitaba “autodeportarse” del país.
La notificación generó alarma inmediata, dado que Adam es ciudadano estadounidense por nacimiento. Abogados, activistas y organizaciones civiles se han pronunciado para respaldarlo, alegando que este error podría marcar un precedente preocupante para otros ciudadanos con ascendencia latina. Incluso el abogado mostró para una entrevista a CBS8, medio local de San Diego, su pasaporte y acta de nacimiento.
El silencio oficial y el llamado a revisar protocolos
Hasta el momento, el gobierno de California no ha emitido declaraciones públicas sobre el caso. Sin embargo, diversas entidades estatales ya promueven iniciativas para mejorar el manejo de datos personales por parte de agencias federales. Esto con el objetivo de evitar errores como este.
Grupos de derechos civiles han hecho un llamado a que el DHS emita una disculpa pública y revise sus mecanismos de verificación de identidad, para proteger los derechos de ciudadanos estadounidenses, en especial aquellos de origen latino.
¿Qué es la autodeportación?
La autodeportación es un mecanismo implementado recientemente por el gobierno federal mediante la aplicación CBP One. Está dirigido a personas en situación migratoria irregular que decidan abandonar voluntariamente Estados Unidos. El programa ofrece apoyo logístico y, en algunos casos, financiero para facilitar el regreso a sus países de origen, con el objetivo de evitar arrestos y reducir costos asociados a detenciones y deportaciones forzadas.