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ISAAC SUÁREZ
Actualizado
Dos derrotas en las tres primeras jornadas, traducidas en tres puntos de nueve posibles, no parecerían el mejor punto de partida para que el Atlético acabe dentro del grupo de ocho elegidos que sellarán el pase directo a los octavos de la Champions. Sin embargo, conviene no olvidar dos importantes matices: los de Simeone ya saben cómo hacerlo y cuentan con el mejor trampolín desde el que dar el gran salto, el Metropolitano.
Sólo hay que remontarse un año atrás para encontrar el espejo en el que mirarse. Pese a que los rojiblancos estrenaron el curso pasado el novedoso formato de la competición venciendo al Leipzig (2-1), el posterior batacazo ante el Benfica (4-0) y el sorprendente (por inesperado al jugarse al calor de su afición así como por la colección de ocasiones desperdiciadas) traspié ante el Lille (1-3) dejaba al Atlético en una situación más que comprometida. Más aún teniendo en cuenta que el siguiente obstáculo en el camino se divisaba en el Parque de los Príncipes ante todo un PSG.
Hoy, después de otras dos derrotas, aunque a domicilio y en casa de dos de los grandes aspirantes a levantar la Orejona (3-2 en Anfield frente al Liverpool y 4-0 en el Emirates del incontestable Arsenal), El Cholo y su tropa saben que el éxito les sigue esperando repitiendo la misma hoja de ruta. Así, si el triunfo ante el que meses más tarde se coronaría campeón de la Champions de la mano de Luis Enrique fue la antesala de las otras cuatro victorias que les catapultó a la quinta plaza de la competición, el Union Sant Gilloise se presenta esta noche como la primera plataforma desde la que iniciar la remontada.
No obstante, como obliga el modo de conducirse del partido a partido, el Inter de Milán, el PSV, el Galatasaray y el Bodo/Glimt ni siquiera aparecen ahora en el radar, siendo los tres puntos de la visita del flamante campeón de Bélgica el único objetivo a la vista. Un triunfo obligadopor la posición en la clasificación y cantado por los precedentes que acompañan a los de Simeone en el Metropolitano.
Un hogar casi inexpugnable
Si las últimas seis citas del Atlético en casa se han saldado con victoria y debe bucearse 12 partidos para encontrar la última derrota (ante el Barça en la vuelta de las semifinales de la Copa), la inexpugnabilidad del Metropolitano es aún mayor en la Champions. De hecho, las once últimas noches europeas han supuesto diez triunfos, doblando la rodilla hasta cinco equipos de los que figuran en el palmarés de campeones de la competición (Real Madrid, Borussia Dortmund, Inter de Milán, Celtic y Feyenoord) o el Bayer Leverkusen de Xabi Alonso.
Eso sí, la única sombra, representada en el citado accidente frente al Lille, sirve como recordatorio de que la más mínima relajación en la máxima competición continental tiene un coste muy elevado, con lo que sólo mantener el idilio con el Metropolitano puede hacer posible el plan del Atlético.
