Por Aria Bendix y Katie Mogg – NBC News
Después de que la Corte Suprema de Florida despejó el camino a la prohibición estatal al aborto después de las seis semanas, clínicas en Carolina del Norte y Virginia han dicho que se están preparando para una recibir una afluencia de pacientes.
Una vez que la ley entre en vigor el 1 de mayo, Florida dejará de ser un refugio para las personas que buscan abortos en todo el sur de Estados Unidos. Actualmente, el estado permite abortar hasta las 15 semanas de embarazo, una política mucho menos restrictiva que las aplicadas en muchos estados cercanos, como Alabama, Georgia y Mississippi, desde que la Corte Suprema anuló Roe v. Wade en 2022.
Más de 9,300 personas viajaron a Florida desde otros estados para realizarse un aborto el año pasado, más del doble que en 2020, según datos del Instituto Guttmacher, una organización investigativa que apoya el acceso al aborto.
Alrededor de 84,000 abortos fueron realizados en Florida en 2023, lo que representa alrededor de 1 de cada 12 abortos en todo el país.
A partir de mayo, la opción más cercana para las floridanas y otras personas del Sur que deseen abortar será Carolina del Norte, que permite el procedimiento hasta las 15 semanas, pero exige que las personas reciban asesoramiento en persona con al menos 72 horas de antelación. La siguiente opción más cercana es Virginia.
Las clínicas de abortos de ambos estados se están preparando para acoger a más pacientes, y para ello han añadido personal o ampliado su horario de atención. Los proveedores han tenido tiempo para prepararse, ya que el gobernador de Florida, Ron DeSantis, firmó la prohibición de seis semanas en el estado en abril de 2023. Su implementación estaba en espera de la decisión de la Corte Suprema del estado, que tuvo lugar el lunes.
El Bristol Women’s Health Center, que ofrece abortos en el suroeste de Virginia, amplió su horario hace unos meses para dar cabida a personas de Florida y otros estados del sur. También ha empezado a ofrecer servicios por las tardes y a veces los fines de semana.
“Ya es bastante difícil para alguien que está conduciendo 12 horas”, afirmó Karolina Ogorek, directora administrativa del centro. “Mientras el estado les quita sus opciones de salud reproductiva, como proveedor de abortos y clínica, queremos darles tantas opciones como sea posible para que puedan acceder a la atención que necesitan”.
El centro también tiene previsto trabajar con organismos de financiación como The Pink House Fund, en Mississippi, para ayudar a cubrir los gastos de viaje y alojamiento de las pacientes que vienen de lejos.
A Woman’s Choice, una red de clínicas con sede en Jacksonville, Florida, abrió una nueva clínica en Virginia el mes pasado en previsión de la medida en Florida. Esa clínica está trabajando para añadir médicos, según Amber Gavin, vicepresidenta de promoción y operaciones de la organización.
Pero aún así, explicó, la demanda podría resultar ser bastante alta.
“Florida estaba experimentando una enorme afluencia de pacientes del sureste, y me preocupa mucho que los estados vecinos no puedan acoger a todos las floridanas y a la gente del sureste”, aseguró Gavin.
Jenny Black, presidenta de Planned Parenthood South Atlantic, también declaró que las clínicas de la organización en Carolina del Norte están ofreciendo más citas. Pero esos centros ya tienen un tiempo de espera de dos semanas para los abortos.
“El personal de los centros de salud de Planned Parenthood en Carolina del Norte está haciendo todo lo posible para ampliar rápidamente la capacidad y aumentar la disponibilidad de citas antes de que entre en vigor la prohibición casi total en Florida, pero no será suficiente para detener la marea de pacientes de todo el sur a las que les quedan pocas opciones”, señaló Black en un comunicado.
Para muchas mujeres, viajar para tener un aborto no es una opción por falta de recursos u otras circunstancias”.
Las clínicas de Florida se anticiparon a la nueva ley estatal, por lo que ya han formado a personal adicional para realizar ecografías y confirmar los embarazos. Están intentando atender al mayor número posible de pacientes antes de que acabe el mes.
“Estamos abriendo más citas para ecografías programadas para los próximos 30 días para que la gente venga”, explicó Michelle Quesada, vicepresidenta de comunicaciones y marketing de Planned Parenthood del Sur, Este y Norte de Florida.
Quesada advirtió que, a partir de mayo, las pacientes tendrán que presentarse antes de las seis semanas, ya que la ley de Florida requiere dos visitas en persona a una clínica, con 24 horas de diferencia, antes de un aborto.
“Tendrías que enterarte de que estás embarazada en tu quinta semana de embarazo, que es una semana después de que no tengas el periodo para alguien con un ciclo perfecto de 28 días”, precisó Quesada.
“Sólo puedo imaginar en 30 días el enorme volumen de pacientes que van a estar confusas, asustadas, que sentirán que no tienen otra opción cuando sepan que tienen más de seis semanas”, añadió.
La ley de Florida permite excepciones por violación, incesto y cuando esté en riesgo la vida de la madre.
“Creo que está bien abortar si la vida de la madre está en peligro. Esta ley en particular, este proyecto de ley de seis semanas, sí lo contempla, por lo que no habría ninguna razón para tener que viajar”, indicó Ingrid Duran, directora legislativa estatal del Comité Nacional del Derecho a la Vida, una organización contra el aborto.
Duran señaló que la prohibición de Florida reserva 25 millones de dólares para ampliar la Red de Atención al Embarazo de Florida, un grupo de centros cuyo objetivo es convencer a las mujeres de que no aborten. Estos centros ofrecen a las mujeres embarazadas asesoramiento y suministros como asientos de autos para bebés y pañales, pero se sabe que algunos proporcionan información inexacta o engañosa.
Duran declaró que la financiación puede ayudar a hacer frente a la falta de acceso a la atención médica, asesoramiento y apoyo que ella cree que podrían ser “algunas de las razones por las que las mujeres optan por abortar”.
Sin embargo, el destino del acceso al aborto en Florida no está escrito en piedra: La Corte Supremo del estado también decidió que una propuesta de enmienda a su Constitución que consagraría la protección del aborto puede estar en la papeleta electoral de noviembre.
“Lo que hemos visto en otros estados es que cuando el aborto está en la papeleta, gana”, comentó Gavin.
