Autoridades alertaron sobre posibles inundaciones, árboles caídos y apagones.
La confianza crecía el viernes en la probabilidad de que otra fuerte tormenta llegue a California, con fuertes lluvias y cargada de nieve, a principios de la próxima semana, dijeron los meteorólogos.
La perspectiva de un clima más invernal aumentó a medida que el estado se volvió ventoso y frío, con lluvia residual y chubascos de nieve en las montañas después de la tormenta más reciente. Se esperaba que el próximo sistema llegue el lunes.
“Todas las amenazas que hemos estado mencionando para las tormentas de marzo hasta ahora seguirán en juego la próxima semana… árboles caídos, cortes de energía, inundaciones, aumentos en riachuelos/arroyos”, escribió la oficina meteorológica del Área de la Bahía de San Francisco.
California ha sido azotada por tormenta tras tormenta desde finales de diciembre.
Se han declarado estados de emergencia en 43 condados. Hasta el jueves, más de 700 personas estaban alojadas en 16 refugios en ocho condados, según la Oficina de Servicios de Emergencia del Gobernador.
En la costa central, las autoridades del condado Monterey levantaron el jueves las órdenes de evacuación para la comunidad agrícola de Pájaro, que se inundó por la ruptura del dique del río a principios de este mes. Las autoridades advirtieron que no había agua potable y que el sistema de alcantarillado permanecía fuera de servicio.
Los residentes encontraron lodo, escombros y posesiones en ruinas.
California
“Esto no es habitable”, dijo Adrián Pérez, de 18 años, al San Francisco Chronicle mientras ayudaba a sus padres a limpiar su apartamento.
