Por Nandita Bose y Kanishka Singh
WASHINGTON, 2 abr (Reuters) – La Casa Blanca celebró el martes una pequeña cena “iftar” para celebrar el mes sagrado del Ramadán, aunque algunos musulmanes rechazaron la invitación por la frustración con la política del presidente estadounidense Joe Biden hacia Israel.
Biden se reunió con líderes musulmanes antes de celebrar una pequeña cena con altos cargos musulmanes de su gobierno, la primera dama Jill Biden y la vicepresidenta Kamala Harris y su marido.
“El presidente Biden será el anfitrión de una reunión con líderes de la comunidad musulmana para discutir asuntos de importancia para la comunidad”, dijo el martes a periodistas la secretaria de prensa de la Casa Blanca, Karine Jean-Pierre, quien explicó que los líderes preferían tener una reunión que una cena.
La Casa Blanca “ajustó el formato para ser receptiva”, añadió.
Uno de los asistentes, el doctor Thaer Ahmad, médico de urgencias que pasó al menos tres semanas en Gaza, dijo a CNN que abandonó la reunión del martes antes de que terminara.
“Por respeto a mi comunidad, por respeto a todas las personas que han sufrido y que han muerto, tuve que abandonar la reunión”, dijo Ahmad, quien afirmó que fue el único palestino-estadounidense en el encuentro y que “no hubo mucha respuesta” por parte de Biden cuando anunció su marcha. “En realidad dijo que lo entendía, y yo me marché”, comentó Ahmad a CNN.
El acto supone un fuerte contraste con mayo de 2023, cuando Biden ofreció una recepción con motivo del Eid para marcar el final del Ramadán. Decenas de asistentes aclamaron a Biden en la Casa Blanca mientras les decía: “Esta es su casa”.
Entre los congresistas musulmanes que asistieron a ese acto se encontraban las congresistas Ilhan Omar y Rashida Tlaib, una estadounidense de origen palestino,. Ahora se encuentran entre las más críticas de la política de Biden hacia Gaza.
(Edición en español de Javier López de Lérida)
