Una ola de calor se intensificará este lunes 23 de junio en grandes regiones de Estados Unidos, mientras se esperan tormentas fuertes, lluvias excesivas e incluso riesgos de inundaciones en distintos puntos del centro del país norteamericano. Estas condiciones extremas marcarán una jornada climática intensa, con impactos que afectarán tanto a zonas urbanas como rurales.
Las autoridades meteorológicas anticiparon que el calor alcanzará niveles excepcionales este lunes, con un domo de alta presión que permanecerá estacionado sobre el este de EE.UU. Este fenómeno mantendrá temperaturas extremas desde el Medio Oeste hasta la costa del Atlántico.
Las ciudades más densamente pobladas sentirán con mayor intensidad los efectos de la ola de calor:
El Servicio Meteorológico Nacional (NWS, por sus siglas en inglés) advirtió que el riesgo de enfermedades relacionadas con el calor crecerá significativamente, en particular en personas sin acceso a refrigeración o hidratación adecuada. En palabras del organismo, este tipo de condiciones representan “eventos raros y prolongados, con escaso o nulo alivio nocturno”.
Además del calor extremo en el este, se prevé que el centro de Estados Unidos experimente tormentas severas y lluvias intensas a lo largo de la jornada. Un sistema de baja presión en altura, combinado con frentes estacionarios en superficie, favorecerá la aparición de convección en amplias áreas, desde las Llanuras Centrales hasta el Medio Oeste.
Entre las zonas más afectadas por tormentas este lunes se incluyen:
El sur de Colorado, el este de Nuevo México y el oeste de Texas también estarán bajo observación este lunes, debido a un incremento anómalo en la humedad disponible y a la interacción con una vaguada en superficie. Las tormentas que puedan desarrollarse durante la tarde podrían acumular varios milímetros de precipitación en poco tiempo.
El NWS mantiene una advertencia por precipitaciones excesivas en:
La agencia explicó que estas condiciones podrían agravarse el martes, cuando se estima que el riesgo de inundaciones aumente a niveles moderados, es decir, al menos un 40% de probabilidad de impactos significativos.
Mientras que gran parte del país norteamericano enfrentará calor sofocante, el oeste de Estados Unidos experimentará una pausa en las altas temperaturas gracias a una vaguada de altura que permanece activa sobre la región. Las temperaturas allí se mantendrán por debajo de los valores promedio para esta época del año.
En ciudades como San Francisco o Portland, las máximas previstas oscilarán entre 70 °F (21 °C) y 75 °F (24 °C), con mañanas frescas y tardes templadas. Para el martes, se anticipa un leve repunte térmico a medida que el sistema de altura comience a debilitarse.