En los últimos años, ha crecido el interés en la relación entre la alimentación y la salud mental, derivando en el deseo de las personas por implementar dietas equilibradas y nutritivas que no sólo beneficien su cuerpo, sino que desempeñen un rol crucial en su bienestar emocional.
En ese sentido, la alimentación nutritiva apunta al consumo de una variedad de alimentos que proporcionen los nutrientes necesarios para el funcionamiento óptimo del organismo, lo que incluye carbohidratos, proteínas, grasas saludables, vitaminas y minerales.
Al respecto, voceros de Corporativo Kosmos, empresa mexicana líder en servicios de alimentarios, revelaron que una dieta balanceada puede reducir hasta en un 30% los síntomas de depresión, por lo que, resulta imperativo incluir en la alimentación diaria productos como pescados grasos (salmón, atún, sardinas), frutas cítricas (naranjas, limones, toronjas), frutos secos y semillas (nueces, almendras, chía), cacao natural y plátano.
Ante ello, Corporativo Kosmos cita que varios estudios han demostrado que ciertos alimentos pueden influir positivamente en el estado de ánimo y la función cognitiva como, por ejemplo, los ácidos grasos omega-3, los cuales están asociados con una reducción de los síntomas de depresión y ansiedad.
“Una dieta equilibrada no sólo está asociada a una mejor salud mental, sino también a funciones cognitivas superiores e incluso mayores cantidades de materia gris en el cerebro” señalan los expertos.
De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), la salud mental se define como el estado de bienestar mental donde las personas tienen la capacidad de superar obstáculos del estrés de la vida, amplificar habilidades que ayudan a trabajar y aprender a contribuir mejor con el entorno.
Partiendo de ello es que la empresa mexicana destaca la importancia de la ingesta de ciertos alimentos como frutas y verduras ricas en fibra dietética, vitaminas y micronutrientes para tener un impacto positivo en la composición del microbiota intestinal y proteger al cerebro contra el daño oxidativo.
Los patrones dietéticos
Un estudio de un grupo de investigadores de la Universidad de Warwick aporta que la alimentación, la cognición y la salud mental podrían estar relacionadas con alteraciones en los biomarcadores moleculares, así como con cambios en la estructura y las funciones cerebrales.
Voceros de Corporativo Kosmos resaltaron que en función de las cantidades, variedad o combinación de diferentes alimentos y bebidas en las dietas y de la frecuencia con la que se consumen habitualmente, han surgido varios patrones dietéticos tradicionales, como el “patrón dietético occidental” y el “patrón dietético mediterráneo”.
De ahí que, la relación entre los patrones dietéticos y las funciones cognitivas podría estar potencialmente mediada por el eje intestino-cerebro.
En este sentido, Corporativo Kosmos explicó que los patrones dietéticos específicos, como la “dieta occidental”, tienen el potencial de alterar el equilibrio de la microbiota intestinal, provocando inflamación y estrés oxidativo.
Mientras que, los patrones de una “dieta mediterránea” promueven un estilo de vida activo en donde se pueden disfrutar de alimentos íntegros y nutritivos que influyen en la aparición de condiciones a nivel mental, al tener un efecto anti-inflamatorio a nivel cerebral.
Finalmente, la empresa mexicana aludió a que resulta imprescindible establecer preferencias alimentarias saludables en las primeras etapas de la vida, con la finalidad de desarrollar dietas sanas y equilibradas para un crecimiento saludable tanto del cuerpo como de la mente.