Mientras la vida fluye sobre el puente Juan Pablo Duarte, debajo de sus estructuras se libra una intensa batalla para combatir la contaminación de los ríos que circundan la ciudad. Se trata de un proyecto de reciclaje de triple impacto: social, económico y ambiental.
Cuatro instituciones se han unido para reducir el vertido de residuos sólidos en los recursos hídricos del Gran Santo Domingo: la Fundación AecoGrup, Eco Bottle RD, la Asociación de Fundaciones de Saneamiento Ambiental por el Reciclaje (Asofunsarec) y la Alcaldía del Distrito Nacional.
En un espacio de aproximadamente 300 metros ubicado en el aproche del puente y facilitado por la Alcaldía del Distrito Nacional, funciona un centro de acopio para la recepción y procesamiento de cartón, plásticos, tetrapack, latas de conserva y vidrios. Los materiales llegan a través de programas implementados en comunidades, empresas, plazas comerciales y particulares.
Rubén Sánchez, director ejecutivo de la Fundación AecoGrup, una de las entidades involucradas en el proyecto, explicó que muchas personas llevan sus residuos de manera voluntaria. Según Sánchez, las recaudaciones varían, pero en promedio alcanzan unos 50,000 pesos mensuales. Estos fondos, junto con el apoyo de una fundación internacional, permiten cubrir los costos operacionales y pagar la nómina de los colaboradores.
Bolsas de amor
“Entregamos una bolsa de alimentos a las personas involucradas en el proceso de recolección, no necesariamente con lo que se recolecta en el mismo entorno, sino a nivel general. Lo mismo hacemos con las escuelas que forman parte del programa”, comentó Sánchez.
El programa nació con la finalidad de ayudar al medio ambiente y actualmente recibe entre 6,000 y 7,000 kilos de cartón y alrededor de 2,000 botellas mensuales. El centro de acopio cuenta con una máquina compactadora para procesar botellas plásticas y papel.
“República Dominicana es un país limpio, pero nos falta un poco de educación para saber vivir en entornos limpios. Estamos hablando de generaciones que tienen el hábito de consumir y tirar a la calle”, señaló Sánchez.
Reciclaje de botellas
La Fundación AecoGrup trabaja en alianza con Eco Bottle RD, una empresa que recicla y procesa vidrios dentro del mismo establecimiento. Braulio Barría Vargas, un exmilitar chileno residente en el país, lidera este proyecto aprovechando su experiencia en el tratamiento de cristales.
Barría aclara que no procesan botellas que tienen retornos a las empresas, como las de cervezas y bebidas gaseosas reconocidas. Junto al vicepresidente de Eco Bottle, Joshua Hilario, se encargan de seleccionar, lavar, y retirar las etiquetas de cada botella. Posteriormente, se cortan con una sierra de dientes de diamante y se someten a un proceso de pulido.
Más educación y apoyo oficial
El director de la Fundación+Eco Bottle RD, Braulio Barría, dice que el reciclaje de botella no cuenta con apoyo en el país y entiende que debía haber entidades que tomen en cuenta al ese sector. “No hay un organismo gubernamental que venga aquí, que diga bien, qué chulo, lo que ustedes están haciendo es de triple impacto. Vamos a aportar, a hacer alguna inyección de dinero, ¿qué es lo que a ustedes le hacen falta? Nosotros le pagamos el empleado, pero no tenemos ese tipo de apoyo“. El centro de acopio ubicado debajo del puente Duarte es un espacio de reciclaje, de creación de conciencia y producción que reduce el efecto negativo de residuos sólidos en el medio ambiente, al tiempo que impacta en lo económico con la generación de empleos.
Licenciado en Comunicación Social por la Universidad Dominicana O&M. Ha ejercido el periodismo desde 1988 en radio, televisión y periódicos.