Ambos candidatos presidenciales han reunido una considerable fortuna aunque es notoria la diferencia entre ellos
Joe Biden y Donald Trump en camino a las elecciones presidenciales
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La política estadounidense a menudo se cruza con las finanzas personales de aquellos que buscan o han ocupado el cargo más alto de la nación. Dos figuras prominentes en este ámbito son Joe Biden y Donald Trump, los actuales candidatos a la presidencia de los Estados Unidos, cuyas fortunas varían significativamente debido a sus diferentes trayectorias profesionales y empresariales.
La fortuna de Joe Biden, de senador a Presidente
Joe Biden, quien ha sido una figura central en la política estadounidense durante más de cinco décadas, posee un patrimonio neto estimado en 9 millones de dólares.
Su carrera abarca desde su largo período en el Senado de EE. UU. hasta la Vicepresidencia y, actualmente, como el 46º presidente. Esta acumulación de riqueza refleja tanto su carrera en el servicio público como sus actividades después de la vicepresidencia, incluidos los ingresos por discursos, libros y la docencia.
Biden se describía a menudo como “Joe de clase media” durante su tiempo en el Congreso, trataba de destacar su modesto patrimonio neto en comparación con sus colegas.
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Sin embargo, después de dejar la Casa Blanca en 2016 como vicepresidente, él y su esposa Jill experimentaron un aumento significativo en sus ingresos, alcanzando un pico de 11 millones de dólares en 2017. Este incremento provino principalmente de discursos y regalías de libros, sumando casi 17 millones de dólares entre 2016 y 2019.
Donald Trump, de heredero empresario a Presidente
Por otro lado, Donald Trump, conocido tanto por su carrera en el ámbito empresarial como en la política, tiene un patrimonio neto estimado en 6,500 millones de dólares. Su fortuna se basa en un imperio que abarca el desarrollo inmobiliario, la tecnología y los medios de comunicación.
Antes de su incursión en la política, Trump era principalmente reconocido como el dueño de The Trump Organization, un conglomerado que incluye desde propiedades comerciales y residenciales hasta campos de golf en todo el mundo.
La incursión de Trump en la tecnología, específicamente con el lanzamiento de su plataforma de redes sociales, Truth Social, significó un aumento significativo en su valor neto, lo que proyectó su participación en 3 mil millones de dólares tras la aprobación de una fusión empresarial en marzo de 2024.
Además, Trump ha generado ingresos significativos a través de “El Aprendiz”, un reality show que co-produjo con Mark Burnett, y otros acuerdos de licencia y patrocinio valorados en 230 millones de dólares.
Comparación de fortunas: ¿quién tiene más dinero?
La comparación de las fortunas de Biden y Trump ilustra dos trayectorias muy diferentes hacia la acumulación de riqueza. Mientras que Biden ha visto un crecimiento en su patrimonio neto principalmente después de su servicio público y a través de esfuerzos literarios y de oratoria, Trump ha construido su riqueza a través de empresas inmobiliarias, de entretenimiento y tecnológicas, que han consolidado su estatus como uno de los individuos más ricos y controvertidos de Estados Unidos.
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Ambas historias reflejan no solo las diversas formas en que los individuos pueden acumular riqueza en EE. UU., sino también cómo estas finanzas pueden influir y ser influenciadas por sus carreras en el servicio público.
A medida que Biden busca un segundo mandato y Trump está en busca de volver a la presidencia, sus patrimonios netos y cómo los administran seguirán siendo de gran interés para el público y los analistas políticos.
