No hay suficiente información pero sabemos que los dioses olmecas representaban aquello que era lo más importante para esta civilización
Si bien es cierto que en la actualidad tenemos un panorama claro de los principales dioses olmecas; en lo referente a su mitología, es decir, a las creencias religiosas de esta civilización, aún hay mucho desconocimiento.
El principio de los dioses olmecas
Esta cultura se desarrolló en el llamado periodo preclásico o formativo de Mesoamérica, esto es, desde el año 1,500 a.C. hasta el 400 a.C. Por esta razón, se considera que es la primera gran civilización precolombina.
Asimismo, los olmecas florecieron sobre todo en Veracruz y Tabasco. Su economía se basó en la agricultura y eran politeístas; creían en un gran número de dioses, muchos de ellos relacionados con la naturaleza.
Los dioses de los olmecas provenían del mundo natural
La agricutura, los animales y los elementos como el fuego y el agua, eran fuente de inspiración para la religión olmeca, siendo el jaguar la figura más importante de los dioses de la cultura olmeca, incluso era considerado un animal mítico.
¡Descubre el México Auténtico a través de nuestro podcast!
Igualmente, los dioses de la cultura olmeca incluían representaciones de seres que eran mitad persona y mitad animal, como el dios hombre jaguar; pues para ellos no solo los dioses podían lograr estas transformaciones, sino también los gobernantes, quienes al haber sido elegidos por las deidades, tenían poderes sobrenaturales.
¿Llevaban a cabo sacrificios humanos? Existe la creencia de que sí, aunque en menor medida que las culturas mesoamericanas que surgirían posteriormente.
Religión y dioses de los olmecas
Primero, hay que señalar que para esta cultura casi todo tenía vida, no solo las personas y los animales, también los árboles, ríos y las montañas, por poner un ejemplo, pues estas eran consideradas un punto de reunión entre el cielo, la tierra y el infierno.
A continuación te presentamos los principales dioses de los olmecas:
El jaguar
Como ya mencionamos antes, el jaguar, también llamado nahual, era el dios más importante de este pueblo, pues regía la fertilidad. Algunos estudiosos creen que el pueblo olmeca se consideraba descendiente de este felino.
El dragón
Parece que esta deidad combinaba rasgos de la serpiente, el jaguar y algunas aves. Era conocido también como monstruo de la tierra y se vinculaba al poder y la autoridad. Dentro de la religión olmeca, fue uno de los más representados, después del jaguar.
La serpiente emplumada
Cabe señalar que esta deidad es común en varias culturas mesoamericanas, como la maya o la quiché. También fue uno de los principales dioses de los olmecas, quien favorecía los cultivos de maíz. De la misma forma, se asociaba con la vida y era uno de los dioses del viento.
Homshuk
Ciertamente era el dios del maíz porque se representaba como un óvalo con rasgos humanos y de su cabeza brotaban diversos símbolos asociados a este grano. Recordemos que este alimento fue la base gastronómica y económica de muchas civilizaciones precolombinas, no solo de los olmecas.
Mural dedicado al Dios del maíz: HOMSHUK
“Homxuk”, en popoluca de Soteapan significa “Brote nuevo” porque crece según los ciclos de la planta del maíz. pic.twitter.com/00465L1yru
— Rafael Hernández Hernández (@Rafael_HrdzHrdz) February 25, 2021
Espíritu de la lluvia
Representado en esculturas como un niño, enano o joven, fue un pequeño dios que ayudaba a atraer la lluvia. Obviamente se asociaba a la fertilidad, el nacimiento y la nutrición.
El fuego o Huehuetéotl
En cuanto a este elemento, era representado como un anciano y tenía relación con el inicio y fin de los ciclos. Los olmecas celebraban la fiesta del fuego nuevo cada 52 años. Por último, los arqueólogos descubrieron además que fue uno de los primeros dioses en ser adorado por las culturas mesoamericanas.
Otros dioses de la cultura olmeca
Finalmente, hay que mencionar que algunos fenómenos naturales y animales también fueron considerados fuerzas sagradas; por ello, el rayo, el relámpago, el trueno, serpientes y hasta anfibios gozaron el estatus de divinidades.
