En 2020, una mujer de Florida encontró, sin quererlo, diversos objetos que pertenecían a Ashley Biden, la hija del actual presidente de Estados Unidos, Joe Biden, entre ellos su diario personal, el cual decidió tomar para después venderlo a una organización noticiosa. Por ello, ahora enfrentará una dura consecuencia.
Aimee Harris ha sido sentenciada a un mes en prisión, más tres meses de arresto domiciliario por robar y vender el diario de la hija de Biden hace cuatro años. La condena fue confirmada por un tribunal Federal en Manhattan, liderado por la jueza Laura Taylor Swain, quien dijo que las acciones de la mujer de Palm Beach, fueron “despreciables”.
De acuerdo con la agencia AP, Harris se declaró culpable de un cargo de asociación delictiva en 2022. En ese momento admitió que había recibido US$20.000 de los US$40.000 que la organización noticiosa Project Veritas pagó por los objetos de Ashley, entre los que se encontraba su diario.
Afirmó que había encontrado los objetos personales en la casa de un amigo en Delray Beach. Según se dio a conocer durante el juicio, la hija del presidente había dejado ahí los objetos considerando que estaban seguros, luego de haber pasado una temporada en la primavera de 2020.
Durante el juicio, Harris ofreció una disculpa a Ashley Biden diciendo que lamentaba haber hecho que su niñez y su vida se hicieran públicos. Afirmó que las razones para haber aceptado el trato es que es una madre soltera y una sobreviviente de violencia doméstica y traumas sexuales. De hecho, no se presentó a varias audiencias por estar cuidando a sus dos hijos, de 8 y 6 años.
El diario fue entregado a la prensa. (Imagen de referencia)
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Con el diario de la hija de Biden, se quiso afectar la política estadounidense
La venta del diario personal de la hija de Joe Biden, Ashley, ha generado gran debate con respecto a la ética periodística y la invasión a la privacidad. Pero, el caso va más allá, pues durante el juicio se reveló que inicialmente la mujer de Florida intentó vender las pertenencias a los responsables de la campaña presidencial de Donald Trump.
Con la intención de buscar afectar la imagen de Joe Biden durante el periodo electoral, Harris buscó no solo beneficio económico, sino también influir en el panorama político nacional filtrando información íntima de la hija del mandatario.
No obstante, terminó vendiendo el diario a Project Veritas, fundada en 2020, que se identifica como una organización noticiosa y se ha hecho conocida por haber hecho públicas grabaciones con cámaras ocultas que han afectado a medios de comunicación, organizaciones sindicales y políticos demócratas.
