Por Adriana Gomez Licon – The Associated Press
La compañía de medios sociales fundada por el expresidente Donald Trump solicitó un programa de visas de negocios que él trató de restringir durante su Administración, y que muchos de sus aliados quieren que recorte en un posible segundo mandato.
Trump Media & Technology Group, la compañía detrás de Truth Social, presentó una solicitud en junio de 2022 para una visa H-1B para un trabajador con un salario anual de 65,000 dólares, la categoría salarial más baja permitida bajo el programa. Los datos federales de inmigración muestran que a la empresa se le aprobó el visado unos meses después. La empresa afirma que no contrató al trabajador.
La solicitud del visado pone en conflicto la imagen del candidato Trump, que ha propuesto un programa proteccionista para que las empresas “contraten a estadounidenses”, con la del hombre de negocios Trump, quien ha dicho que sus empresas utilizarán todas las herramientas a su disposición. Los registros muestran que la firma de inversión iniciada por el yerno de Trump y asesor de la Casa Blanca, Jared Kushner, también presentó una solicitud y fue aprobada para contratar a un extranjero como asociado bajo el mismo programa de visados.
Trump Media & Technology Group declaró en un comunicado que la solicitud “se hizo bajo la gestión anterior”, a pesar de que el actual director ejecutivo, expresidente del Comité de Inteligencia de la Cámara de Representantes y viejo aliado de Trump, Devin Nunes, ya estaba al frente de la compañía en el momento en que la solicitud fue presentada por primera vez ante el Departamento de Trabajo.
“La compañía nunca ha contratado –y no tiene planes de contratar– a un trabajador del programa de visados H-1B. Cuando la dirección actual se enteró de esta solicitud, que se hizo bajo la dirección anterior, puso fin rápidamente al proceso en noviembre de 2022”, explicó la empresa en un comunicado.
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Una petición de visado H-1B puede costar a las empresas unos 5,000 dólares por empleado. Las compañías pueden retirar las peticiones incluso después de haber sido aprobadas. Los datos de los registros del Servicio de Ciudadanía e Inmigración no indican cuándo son revocados los visados. Pero una portavoz del Departamento de Trabajo, que también hace un seguimiento de las solicitudes H-1B, dijo que no tenían constancia de que Truth Social hubiera solicitado que se retirara su petición.
Una herramienta para empresas tecnológicas
Las empresas tecnológicas suelen contratar empleados utilizando el programa H-1B. Trump nunca ocultó el hecho de que utilizó los visados antes de convertirse en presidente, especialmente para traer a Estados Unidos a modelos extranjeras y algunos trabajadores para sus hoteles y resorts, según una revisión de las peticiones presentadas desde 2009.
Pero, salvo excepciones para renovar solicitudes existentes, sus empresas no parecían haber vuelto a solicitar visados H-1B hasta la creación de Truth Social.
Los datos del Departamento de Trabajo muestran que Trump Media & Technology Group presentó una solicitud para que un empleado ganara 65,000 dólares. En ella figura como empleador Will Wilkerson, cofundador de la empresa y exvicepresidente sénior de operaciones, quien tendría como ubicación la ciudad de Atlanta.
Wilkerson presentó una denuncia en agosto de 2022 ante la Comisión de Bolsa y Valores de Estados Unidos, en la que alegó que la empresa cometió violaciones. Wilkerson fue despedido, según el diario The Washington Post, y está cooperando con las autoridades federales. Sus abogados se negaron a hacer comentarios.
“No se me debería permitir usarla”
Trump habla con frecuencia de los inmigrantes que cruzan ilegalmente la frontera entre Estados Unidos y México, pero sus políticas en la Casa Blanca también incluyeron frenos a la inmigración legal, como los visados familiares y el programa de lotería de visados.
En un debate de las primarias de 2016, Trump habló sobre el programa de visados H-1B y comentó que era “muy malo” e “injusto” para los trabajadores estadounidenses.
“En primer lugar, creo y conozco muy bien la H-1B. Y es una herramienta que francamente empleo y no se me debería permitir usarla”, afirmó. “En segundo lugar, creo que es muy importante reconocer que soy un hombre de negocios y tengo que hacer lo que tengo que hacer”.
Tres meses después de asumir el cargo, Trump emitió su orden ejecutiva Buy American and Hire American, que ordenó a los miembros del Gabinete sugerir reformas para garantizar que las visas H-1B se otorgaran a los solicitantes mejor pagados o más calificados para proteger a los trabajadores estadounidenses. Anteriormente había dicho que el programa era utilizado por las empresas tecnológicas para conseguir trabajadores extranjeros a cambio de salarios más bajos.
Durante su Gobierno, un estudio de la Fundación Nacional para la Política Estadounidense, entidad no partidista, reveló que la Administración estaba examinando más los casos, solicitando más información a las empresas que solicitaban contratar trabajadores extranjeros y denegando más peticiones.
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El manual Proyecto 2025, compilado por aliados que se preparan para la posible transición de Trump al poder, indica que el programa H-1B debe transformarse “en un mecanismo de élite exclusivamente para traer a los ‘mejores y más brillantes’ con los salarios más altos, garantizando al mismo tiempo que los trabajadores estadounidenses no se vean perjudicados por el programa”.
Las empresas del ámbito de los servicios profesionales, científicos y técnicos representan más del 60% del total de visados concedidos, afirmó Nicolas Morales, economista especializado en trabajo y migración, del departamento de investigación del Banco de la Reserva Federal de Richmond. Morales aseguró que el programa de visados ha sido beneficioso para que las pequeñas empresas se mantengan activas.
“Ganar la lotería H-1B realmente les ayuda. Aumenta sus posibilidades de supervivencia”, explicó. “En los próximos cinco años, es más probable que sigan activas sobre todo las pequeñas empresas que dependen mucho de la mano de obra de alto nivel”.
Las solicitudes exigen que las empresas aseguren que proporcionarán a los trabajadores extranjeros las mismas prestaciones ofrecidas a los trabajadores estadounidenses, y que pagarán más de lo que pagan a otros con experiencia y cualificaciones similares o un salario mayor que el promedio para esa ocupación. Las empresas también tienen que notificar la solicitud a los trabajadores mediante la colocación de un aviso en dos lugares del centro de trabajo.
Gran parte de las críticas al programa H-1B hacen referencia a las empresas que ofrecen salarios en las categorías salariales más bajas a trabajadores extranjeros. La solicitud presentada por la empresa de inversiones de Kushner para contratar a un empleado extranjero parece caer en ese terreno.
El Departamento de Trabajo certificó un documento en el que la firma de inversiones de Kushner especificaba que pagaría a este empleado un salario de 200,000 dólares, por debajo del nivel salarial más alto para los visados H-1B, típicamente reservados para aquellos que son expertos en su campo y tienen grandes responsabilidades. Datos recientes de los Servicios de Ciudadanía e Inmigración muestran que la empresa obtuvo la aprobación del visado.
Kushner no se ha sumado a la campaña de Trump y ha estado trabajando para conseguir sus propias metas empresariales, presentado proyectos turísticos en los Balcanes.
