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¿Cuáles son las principales corrientes del cristianismo? – El Orden Mundial – EOM

Autor: El Orden Mundial – EOM
¿Cuáles son las principales corrientes del cristianismo?

El papa Francisco y el patriarca Bartolomé I en 2014 en Jerusalén. Fuente: Nir Hason (Wikimedia Commons)

Las principales corrientes del cristianismo son el catolicismo, el protestantismo y los ortodoxos. El cristianismo cuenta con unos 2.300 millones de fieles en el mundo. La comunidad católica representa un 49% y destaca en Europa occidental y América Latina. Le siguen los protestantes, que representan un 22% y predominan en el norte de Europa y en antiguas colonias británicas, alemanas y neerlandesas. En tercer lugar, los ortodoxos aglutinan al 12% de los fieles cristianos y se extienden sobre todo por Europa oriental.

Asirios y ortodoxos: las primeras escisiones

La historia del cristianismo está llena de divisiones internas. Las primeras escisiones se produjeron en los concilios de Éfeso (año 431) y Calcedonia (451) por discrepancias sobre la naturaleza y la divinidad de Cristo. Entre las corrientes que se separaron estaban los asirios y las iglesias ortodoxas orientales, que incluían a los coptos egipcios y a los armenios, entre otros. Sin embargo, la primera gran ruptura en la cristiandad fue el cisma del año 1054, que originó la división entre la Iglesia católica y la ortodoxa.

La fractura entre católicos y ortodoxos surgió de las luchas de poder entre el papa de Roma y el patriarca de Constantinopla, marcadas por la división del Imperio romano. El catolicismo se considera la única Iglesia fundada por Cristo, quien le encomendó su difusión al apóstol Pedro, el primer papa. El papa es el obispo de Roma, la autoridad suprema de la Iglesia católica y jefe de Estado de la Ciudad del Vaticano. 

Los católicos reconocen la primacía e infalibilidad del papa, mientras que los ortodoxos creen que tiene la misma jerarquía que otros líderes cristianos. Estas diferencias se reflejan en su organización interna: mientras que la Iglesia católica concentra el poder en el papa, los ortodoxos cuentan con una estructura descentralizada, en la que el poder se divide en catorce iglesias autónomas.

Los católicos y los ortodoxos también mantienen diferencias litúrgicas y doctrinales. Ambas corrientes difieren en sus prácticas sobre el bautismo, la oración, la eucaristía y la forma de santiguarse. Del mismo modo, usan diferentes calendarios para celebrar sus fiestas. Mientras que los católicos usan el calendario gregoriano, los ortodoxos mantienen el juliano, que va con trece días de retraso. Sin embargo, la divergencia más notable es el celibato de los sacerdotes. Los ortodoxos permiten el casamiento de los sacerdotes siempre que estos no quieran ascender a obispos.

La Reforma protestante, fuente de corrientes del cristianismo

El cristianismo occidental volvió a fragmentarse en 1517 con la irrupción del protestantismo. La Reforma protestante impulsada por Martín Lutero en Alemania surgió como respuesta a la corrupción del papado. Los protestantes promovieron un cristianismo más austero, primitivo e individual, reduciendo los sacramentos de siete a dos: el bautismo y la comunión. Consideran que la Biblia es la única fuente de conocimiento de Dios y que cualquier persona puede interpretarla. El protestantismo también rechaza la autoridad del papa y la adoración de los santos y la Virgen María, ya que lo consideran una idolatría.

En esa época hubo más divisiones. El antecedente directo de los protestantes fueron los husitas de Bohemia en el siglo XV, que anticiparon las tesis luteranas. Junto al protestantismo, emergió un reformismo radical que abogaba por la separación total entre Estado y clero y por la abolición de la propiedad privada, pues creían que la Iglesia no necesitaba bienes materiales. De esta reforma radical surgió el anabaptismo, del que surgirían los evangélicos y los pentecostalistas.

Junto al anabaptismo existen otras tres grandes ramas dentro del protestantismo: el luteranismo, el calvinismo y el anglicanismo. La doctrina luterana es la más conocida y predomina en Alemania, las repúblicas bálticas —Estonia, Letonia y Lituania— y los países escandinavos. Por su parte, el calvinismo nació en 1560 en Suiza de la mano del teólogo francés Juan Calvino, y es popular en Países Bajos y Escocia. Finalmente, el anglicanismo surgió en 1534 por la ruptura del rey Enrique VIII de Inglaterra con Roma después de que el papa se negara a anular su matrimonio con Catalina de Aragón. La expansión de las corrientes anglicanas como el metodismo, el presbiterianismo y el bautismo facilitaron la irrupción del movimiento evangélico por América.

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