MIAMI.- En un contexto de tensiones políticas en Florida, los legisladores estatales convocaron una nueva sesión especial para abordar el tema de la inmigración ilegal, esta vez respaldados por el gobernador Ron DeSantis.
Esta decisión se produce tras una sesión anterior que evidenció discrepancias entre DeSantis y los líderes legislativos republicanos.
El presidente del Senado, Ben Albritton, y su homólogo de la Cámara de Representantes, Daniel Pérez, ambos republicanos, anunciaron el inicio de la sesión especial este martes.
Albritton y Pérez presentaron resúmenes de proyectos de ley que buscan fortalecer la colaboración entre las fuerzas del orden locales, estatales y federales en la lucha contra la inmigración ilegal.
Cambio de postura
Entretanto, DeSantis elogió a Albritton y Pérez como “grandes socios” y agradeció al comisionado de Agricultura, Wilton Simpson, por su papel en la aplicación de la ley migratoria.
El gobernador afirmó que, con estas políticas, Florida apoyará a la administración Trump en su objetivo de poner fin a la inmigración ilegal, considerándolo una victoria para los habitantes del estado.
Esta postura contrasta con la situación de hace dos semanas, cuando DeSantis convocó una sesión especial para tratar la política migratoria y otros temas.
En esa ocasión, Albritton y Pérez consideraron la convocatoria prematura, lo que llevó a la cancelación de la sesión y a la organización de una nueva por parte de los legisladores, quienes aprobaron un proyecto de ley de inmigración que DeSantis amenazó con vetar.
Incluso DeSantis calificó de “teatro” la sesión especial sobre inmigración convocada por los líderes republicanos de la Legislatura de Florida, luego de que estos rechazaran su propuesta más amplia para endurecer la aplicación de las leyes migratorias.
Qué viene
La Cámara de Representantes se reunirá este martes al mediodía, seguida del Senado a la 1:15 p.m. Se espera que los comités de presupuesto de ambas cámaras analicen los proyectos de ley el miércoles, y que las sesiones plenarias se celebren el jueves.
Los proyectos de ley, presentados por el senador Joe Gruters y el representante Lawrence McClure, ambos republicanos, proponen aumentar las sanciones penales para los inmigrantes indocumentados que cometan delitos, mejorar la cooperación entre las agencias policiales locales y el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de Estados Unidos, y crear una Junta Estatal de Control de Inmigración compuesta por altos funcionarios estatales.
Además, buscan imponer la pena de muerte obligatoria para los inmigrantes indocumentados que cometan asesinatos o delitos sexuales contra menores.
Albritton y Pérez señalaron que, al incorporar comentarios del gobernador DeSantis y del comisionado Simpson, junto con la legislación aprobada anteriormente, están avanzando en la implementación de políticas sólidas y proporcionando recursos críticos para apoyar los esfuerzos del presidente Trump en la lucha contra la inmigración ilegal.