El sedentarismo es un mal demasiado generalizado en la sociedad actual, no es nada nuevo. Pero también hay que tener muy en cuenta la otra cara de la moneda: el 16,5% de la población española va al gimnasio, lo que equivale a unos 5,4 millones de personas, según un informe publicado por OBS Business School.
Pero, ¿qué es lo realmente más saludable? El endocrino Francisco Rosero lanza una advertencia que nadie esperaba. Mientras que está generalizado pensar que cuanto más ejercicio hagas, es mejor, el experto pone en jaque esta creencia popular.
Hacer demasiado ejercicio físico podría acelerar tu envejecimiento, según un reciente estudio reciente con más de 22.000 gemelos finlandeses lo confirma, y los resultados están dando mucho de qué hablar.
El estudio en el que se basa Rosero analiza a decenas de miles de gemelos en Finlandia, lo que permitió comparar estilos de vida en personas genéticamente idénticas. ¿El hallazgo más impactante? Las personas moderadamente activas vivían más y mostraban un envejecimiento celular más lento que sus hermanos ultraactivos.
En cambio, quienes se entregaban al ejercicio intenso de forma constante presentaban señales de envejecimiento acelerado a nivel celular, algo que se puede medir a través del llamado “reloj biológico”. Es decir, tu cuerpo puede tener 40 años, pero funcionar como si tuviera 55.
¿Hacer demasiado ejercicio te puede envejecer?
Francisco Rosero explica que, cuando llevamos el cuerpo al límite una y otra vez, se genera un fenómeno conocido como estrés oxidativo. Esto ocurre cuando el cuerpo produce más radicales libres de los que puede neutralizar, lo cual daña las células, incluidos tejidos, órganos y también tu ADN.
Este daño celular continuo se asocia directamente con el envejecimiento.
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, aparición de enfermedades crónicas y un desgaste que, en lugar de sumar años de vida, te los resta.
“El que hace mucho ejercicio envejece más y se enferma más. El que no hace nada, también. La clave está en el punto medio”, explica Rosero. La buena noticia es que no necesitas correr maratones ni levantar pesas todos los días para mantenerte joven y saludable; todo lo contrario.
Con 30 minutos diarios de actividad física moderada, como caminar a paso ligero, nadar, bailar o andar en bici, ya reduces en un 7% el riesgo de mortalidad y ayudas a mantener tu envejecimiento bajo control, tal y como recomienda el endocrino. No es cuestión de intensidad, sino de constancia y equilibrio. Rosero es claro en esto: “No busques en el ejercicio la vida eterna. Busca en tus hábitos.”
El secreto de una vida larga y saludable
Según este experto en endocrinología, el envejecimiento saludable no se trata solo de moverse, sino de adoptar un estilo de vida completo que favorezca a tu cuerpo y tu mente. Aquí tienes la receta básica:
- Comer comida real: deja los ultraprocesados y apuesta por frutas, verduras, proteínas de calidad y grasas saludables.
- Dormir bien: el descanso es cuando el cuerpo se repara y rejuvenece. Dormir mal acelera el envejecimiento, aunque no lo veas de inmediato.
- No fumar: el tabaco es uno de los mayores enemigos de tu reloj biológico.
- Manejar el estrés: meditación, respiración consciente o simplemente desconectar un rato al día pueden marcar la diferencia.
- Hacer ejercicio, sí, pero sin excesos: menos es más si lo haces bien.
El ejercicio con más de 40
La edad es un factor clave. A partir de los 40, el cuerpo ya no se recupera igual, y el riesgo de lesiones, inflamación crónica y desgaste celular aumenta drásticamente cuando sometes al cuerpo a rutinas extremas.
Rosero lo expresa claramente: “No necesitas convertirte en un atleta de alto rendimiento para vivir bien. Sol, buena hidratación y buenos hábitos son suficientes para la mayoría de las personas mayores de 40″.
Así que si estás en esa franja de edad y creías que entrenar como un veinteañero era la forma de “mantenerte joven”, tal vez ha llegado el momento de replanteártelo. A lo que el endocrino añade: ¡No estoy diciendo que se queden quietos! El sedentario también envejece más y se enferma más. El que hace mucho ejercicio envejece más y se enferma más. Sin embargo, una actividad física controlada, diaria, tiene una vejez placentera.
Actividad física diaria, sí. Pero que sea placentera, sostenible y adaptada a tu cuerpo. “30 minutos todos los días, tiene una reducción del 7% del riesgo de mortalidad y envejecían más lentamente”, concluye Rosero.