¿Y si el Dodge Challenger en su configuración más radical no fuera tan rápido como se cree? Esto es justo lo que se está poniendo en duda ahora
El conceto de velocidad difiere mucho si nos referimos a la industria del automóvil americana y la europea. En recta, los vehículos americanos tienen un desempeño increíble, pero al introducir el factor de las curvas, lo cierto es que se produce una equiparación frente a los modelos del Viejo Continente. Entre los automóviles más rápidos del mundo podemos encontrar el Dodge Challenger SRT Demon 170, una versión que disfruta de más de mil CV de potencia de fábrica. ¿Y si esto no fuera suficiente para que fuera uno de los más rápidos?
El Dodge Challenger SRT Demon 170 de 2023 y los rumores que circulan en torno a su velocidad
El Dodge Challenger SRT Demon 170 de 2023 tiene como objetivo ser un referente en prestaciones, pero lo cierto es que cada vez son más voces las que apuntan a que su velocidad máxima podría no ser la que se ha difundido desde su presentación. Si buceas unos minutos por la red, verás que en muchos espacios digitales se apunta a una velocidad máxima teórica de 215 mph (346 km/h). Sin embargo, no hay datos oficiales que indiquen que esto se cumpla. De hecho, algún que otro medio indica que, en realidad, podría alcanzar su pico máximo en los 239 km/h**.
Lo cierto es que no ha sido probado este registro, lo que llevaría a este modelo a ser uno de los automóviles más lentos con motor de más de 500 CV de potencia. Aun así, sin confirmación de que este último registro sea verídico, sí que ha sido una propuesta con un gran desempeño en otras pruebas. Como buen muscle car, cuenta con una configuración especialmente preparada para rendir en una de las pruebas preferidas del público norteamericano, el cuarto de milla.
De hecho, en la prueba del 0 a 60 mph, ha quedado certificado que pudo completar el recorrido en tan solo 1,66 segundos, mientras que en el cuarto de milla lo materializó en 8 segundos. Se trata de registros particularmente interesantes teniendo en cuenta que poseía una configuración original sin introducir modificaciones. Sin embargo, hay ciertas claves que podrían explicar que su desempeño más allá de los 100 km/h no sea particularmente efectivo.
El peso es un hándicap, ya que disfruta de una tecnología que reparte buena parte del mismo en el eje trasero para generar una mayor adherencia al suelo por parte de los neumáticos. Además, no se dispone de una gran aerodinámica, ya que la parte delantera está pensada para que pueda acceder la mayor parte del aire posible a través de la admisión. Se trata, por tanto, de una tecnología pensada para una prueba en la que no tiene rival, al menos, sin la agregación de ‘chucherías’. El Dodge Challenger se encuentra, sin duda alguna, como uno de los grandes referentes del mercado muscle car, un segmento que podría sufrir las consecuencias de la electrificación.
