Demasiados videojuegos, muchas responsabilidades, muy poco tiempo. Tal vez no seas el único que sufre por ello.
En el mundo de los videojuegos, la sensación de falta de tiempo para disfrutar de todas las experiencias se ha vuelto una fuente de estrés compartida por muchos gamers que se encuentran enfrentando un dilema ante el constante flujo de lanzamientos y el elevado costo asociado.
La industria está inundada de títulos, lo que hace difícil seguir el ritmo y experimentar todas las aventuras disponibles y ello puede crear mucha ansiedad en aquellos que no puedan decidir por elegir entre tantas opciones. Y si a eso le sumamos que llegando a los 30 años las responsabilidades, el tiempo y el sueño ya no te acompañan como antes, esto lo hace aún más difícil.
Según medios especializados en videojuegos citados por Tarreo, esta sensación no es algo que estés pasando de forma exclusiva, si no que le sucede a un segmento grande del mercado y el reciente lanzamiento de Dragon’s Dogma 2 ha resaltado aún más esta problemática.
Solo en el primer trimestre del año, se han estrenado múltiples RPG de grandes corporaciones, como Like a Dragon: Infinite Wealth, Granblue Fantasy: Relink, Persona 3 Reload, Unicorn Overlord y Final Fantasy VII Rebirth, lo que subraya la saturación del mercado de forma increíble si consideramos que todos los mencionados están reservados en una sola categoría.
Sin embargo, esta saturación no se limita solo a los RPG, sino que abarca diversos géneros y títulos, de los cuales ya se han anunciado más de un centenar tan solo para 2024.
A pesar de la amplia oferta, muchos juegos pasan rápidamente al olvido en medio de la vorágine de lanzamientos y la efímera atención del público, logrando un éxito esporádico de solo un mes para luego desaparecer del imaginario de los jugadores.
Esta situación se agrava con la problemática del desempleo y los cierres de estudios de desarrollo, lo que contrarresta el entusiasmo por un año prometedor en la industria del videojuego.
El acceso a tantas opciones de entretenimiento puede ser un privilegio, pero también representa un desafío para los consumidores. El alto costo de los videojuegos, sumado a la presión social y las expectativas de que los juegos ofrezcan una cantidad inmensa de horas de juego, genera ansiedad entre los jugadores que se sienten abrumados por la cantidad de opciones disponibles y la necesidad de invertir tiempo y dinero para disfrutar plenamente de ellas.
A pesar de las dificultades, la diversidad y la abundancia de opciones en la industria del videojuego son aspectos positivos que enriquecen la experiencia de los jugadores: el diseñador de videojuegos de Nintendo, Masahiro Sakurai, sostuvo recientemente que era una época genial para ser gamer gracias a la enorme cantidad de títulos, pero que, para los desarrolladores, era un gran desafío, pues el reto ahora está en llamar la atención de los jugadores e incitarlos a utilizar el poco tiempo que tienen en probar sus videojuegos.
