Con información de NBC News y The Associated Press
El miércoles se puso en marcha un movimiento de protesta contra las primeras medidas de la Administración del presidente Donald Trump, cuando miles de manifestantes se reunieron frente a una corte federal en Philadelphia y en los capitolios estatales de California, Nevada, Michigan, Texas, Wisconsin e Indiana, entre otros.
Los manifestantes ondeaban carteles en los que denunciaban a Trump; al multimillonario Elon Musk, líder del nuevo Departamento de Eficiencia Gubernamental de Trump (DOGE); y al Proyecto 2025, un manual de extrema derecha para el Gobierno y la sociedad estadounidenses.
“¡La democracia no es un deporte de espectadores! Hagan algo”, decía un cartel en alto sostenido por un manifestante en Philadelphia.

Entretanto, los legisladores demócratas están organizando protestas frente a las agencias federales, celebrando conferencias de prensa sobre el tema de la resistencia en sus estados y recurriendo a las redes sociales para tratar de combatir las medidas de Trump para reestructurar el Gobierno.
Relegados a la minoría en el Congreso y con pocas herramientas legislativas para controlar a Trump, los demócratas buscan movilizar a los votantes contra su impulso de congelar préstamos y subvenciones federales, desmantelar la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID) y otras agencias y permitir que su zar de la eficiencia gubernamental, el multimillonario Elon Musk, acceda a los datos federales de los estadounidenses.
El lunes, los demócratas del Congreso organizaron una protesta frente a la USAID. El martes, aparecieron frente al Departamento del Tesoro. El miércoles, hablaron ante una multitud cerca del Capitolio y otra fuera del Departamento de Trabajo. Todo esto ocurre mientras los demócratas buscan encontrar su voz y abrirse paso en un entorno mediático abarrotado, mientras Trump abruma el escenario nacional con una acción disruptiva tras otra.
“Esto no es America First, esto es América en retirada”, indicó el senador Chris Van Hollen, demócrata por Maryland, en la manifestación del Capitolio. “Y no vamos a renunciar a los valores estadounidenses”.

El representante Don Beyer, demócrata por Virginia, que representa a más de 70,000 trabajadores federales en su distrito junto a Washington, dijo que las protestas ayudarán a movilizar el apoyo y a influir en la opinión pública.
“La gente necesita saber lo grave que es esto”, afirmó Beyer a NBC News. “Si derribas el Gobierno federal, también derribas toda nuestra sociedad. Si eliminas una de las tres ramas del Gobierno, no puedes dirigir un país”.
En algunas de las protestas y en internet, los demócratas han sido abucheados por manifestantes contra Trump que creen que el partido no está a la altura de las circunstancias. “¡Hagan su trabajo! ¡Hagan su trabajo!”, coreaban los manifestantes a los legisladores en un momento de la concentración en el Capitolio.
“He oído que la gente está frustrada. Y cuando la gente nos pide que hagamos más, creo que vamos a hacer más”, afirmó el representante Greg Casar, demócrata por Texas, de 35 años, presidente del Grupo Progresista del Congreso. “Después de las elecciones, muchos demócratas necesitaron algo de tiempo para hacer examen de conciencia y respirar. Y ahora ese tiempo ha terminado. El multimillonario más rico del mundo puede ahora quedarse con todo el dinero y los datos de nuestros contribuyentes y enriquecerse con ello. Así que es hora de que […] volvamos al ring”.

“Vamos a luchar de forma más inteligente que la última vez”, afirmó. “Pero también tenemos que luchar más duro”.
Un movimiento surgido en internet
Las protestas fueron el resultado de un movimiento que se ha organizado en línea bajo los hashtags #buildtheresistance y #50501, que significa 50 protestas, 50 estados, un día. Los sitios de internet y las cuentas en las redes sociales hicieron llamados a la acción, con mensajes como “rechazar el fascismo” y “defender nuestra democracia”.
Fuera del Capitolio estatal en Lansing, Michigan, una multitud de unas 500 personas se reunió a temperaturas bajo cero. Denunciaron todo, desde los planes de Trump para Gaza hasta la reducción de los derechos de las personas transgénero y los recientes esfuerzos para deportar a las personas que están en Estados Unidos ilegalmente.
Catie Miglietti, de la zona de Ann Arbor, dijo que el acceso de Musk a los datos del Departamento del Tesoro le preocupaba especialmente. Pintó un cartel que representaba a Musk manipulando a Trump con su brazo levantado, evocando el gesto de brazo recto de Musk durante un discurso de enero que algunos han interpretado como un saludo nazi.

“Si no lo detenemos y conseguimos que el Congreso haga algo, es un ataque a la democracia”, afirmó.
Kelsey Brianne, una de las principales organizadoras de la manifestación de Michigan, se enteró del movimiento de protesta el domingo por la noche y ha estado coordinando a los oradores y los protocolos de seguridad.
“Quiero mirar atrás en este momento y decir que hice algo y no me quedé de brazos cruzados“, señaló Brianne en vísperas de las protestas.
Trump ha firmado una serie de órdenes ejecutivas en las primeras semanas de su nuevo mandato sobre todo tipo de temas, desde el comercio y la inmigración hasta el cambio climático. A medida que los demócratas comienzan a alzar la voz en oposición a la agenda de Trump, también han comenzado las protestas.
El domingo, miles de personas marcharon contra el plan de Trump de deportaciones a gran escala en el sur de California, incluso en el centro de Los Ángeles, donde las protestas cerraron una importante autopista durante horas.
Con información de NBC News y The Associated Press