La congresista Nancy Pelosi, primera y única mujer presidenta de la Cámara de Representantes de Estados Unidos, ha anunciado que se retirará de la política en enero del 2027, cuando expire su mandato tras las elecciones legislativas de mitad de mandato. “No me presentaré a la reelección al Congreso. Espero con ilusión mi último año de servicio como vuestra orgullosa representante”, ha anunciado Pelosi a través de sus redes sociales.
Después de 39 años representando a San Francisco en el Congreso, a sus 85 sigue siendo una figura muy influyente, como demostró el año pasado su papel en la renuncia de Joe Biden a su reelección o recientemente con su campaña para aprobar en California, este martes, la iniciativa del gobernador Gavin Newsom de rediseñar distritos electorales para competir con la manipulación de mapas electorales de los republicanos.
“He tenido la oportunidad de representar a nuestra ciudad y a nuestro país en todo el mundo con patriotismo y orgullo. Les digo a mis colegas de la Cámara todo el tiempo: sin importar el cargo que me hayan otorgado, no ha habido para mí mayor honor que estar en el pleno de la Cámara y decir: ‘Hablo en nombre del pueblo de San Francisco’”, ha dicho en el video publicado hoy.
Desde que fue elegida por primera vez en 1987, Pelosi ha servido desde su escaño durante 20 mandatos, en los que ha vivido y protagonizado cambios históricos en la política y la sociedad estadounidense. Hábil a la hora de alcanzar acuerdos con los republicanos, pero también firme en sus convicciones, su papel fue elemental para sacar adelante la ley de Atención Sanitaria Asequible, el llamado Obamacare, un servicio público que los republicanos están intentando sentenciar.
Pelosi ha representado a San Francisco durante 39 años, y ha sido durante ocho la primera mujer presidenta de la Cámara de Representantes
Como speaker de la Cámara de Representantes, cargo que asumió en el 2007 hasta el 2011, durante la crisis financiera, y de nuevo del 2019 hasta el 2023, cuando presidió dos juicios políticos contra Donald Trump. Se convirtió entonces en una figura desafiante contra el autoritarismo del republicano y merecedora, como todos sus enemigos declarados, de uno de sus despectivos apodos: “Crazy (loca) Nancy”.
El presidente ha celebrado su retirada de la política, asegurando que es “una gran noticia para EE.UU.”, pues Pelosi ha sido “malvada, corrupta y se ha centrado en cosas malas para nuestro país”. “Estaba perdiendo rápidamente el control de su partido y nunca lo iba a recuperar. Me honra mucho que me haya sometido a dos juicios políticos y haya fracasado estrepitosamente en ambos”, ha sentenciado en Fox News.
El segundo impeachment se dio tras el asalto al Capitolio, en enero del 2021, en el mayor ataque a la democracia estadounidense desde la guerra civil. Ese día, la turba enfurecida, alentada por Trump, invadió su oficina, arrancó su placa de madera, destrozó mobiliario y uno de ellos se sacó una simbólica foto sentado en su silla con los pies sobre su escritorio. Pelosi, que fue evacuada junto con los líderes del Congreso, Chuck Schumer y Mike Pence, presidía ese día la certificación de la victoria de Biden en las urnas.
Al día siguiente, calificó el ataque como un “intento de insurrección” y pidió la destitución inmediata de Trump. Impulsó su segundo impeachment, que fue aprobado al cabo de una semana y convirtió al mandatario en el primer presidente en la historia en ser sometido dos veces a juicio político. En los meses siguientes, Pelosi también lideró la creación del Comité Selecto del 6 de enero, encargado de investigar los hechos, que recomendó finalmente al departamento de Justicia imputar cargos penales contra Trump.
Trump celebra la retirada de una política “malvada, corrupta y centrada en cosas malas para nuestro país”
Carismática y poderosa en su partido (al que lideró en la Cámara Baja durante 20 años), forjó durante su carrera una extensa lista de contactos, que permitieron a los demócratas recaudar grandes sumas de dinero para sus campañas. Según sus asesores, reunió más de 1.300 millones de dólares en sus cuatro décadas en política.
Su anuncio llega dos días después de las elecciones locales y estatales en varios rincones del país, que se saldaron con contundentes victorias de los candidatos demócratas en la ciudad de Nueva York y en los estados de Virginia, Nueva Jersey, Pensilvania y California, entre otros.
También se da un año después de las elecciones presidenciales, en los que la también californiana Kamala Harris perdió contra Trump en los siete estados clave y los demócratas cedieron el control del Senado, la única cámara legislativa que controlaban, dando a Trump un poder casi absoluto en Washington.
Tras esos comicios, los demócratas comenzaron un proceso de reflexión interna para analizar por qué habían alienado a sus votantes tradicionales, como la clase trabajadora o los latinoamericanos. Identificaron, entre otros motivos, la necesidad de un relevo generacional, que ejemplificó el martes en Nueva York su futuro alcalde, el socialista Zohran Mamdani, de 34 años, y que señala también hoy Pelosi con su anuncio, después de años de rumores sobre su retirada. “Es hora de dar paso a una nueva generación de demócratas”, dijo tras las últimas elecciones de mitad de mandato, en el 2022, cuando los demócratas perdieron su mayoría en la Cámara de Reporesentantes.
El próximo año, se abrirá en su distrito, como en todo el país, un proceso de primarias demócratas, en el que se elegirá al contendiente del partido de cara a las legislativas de noviembre. Ya han declarado su intención de postularse el senador estatal Scott Wiener y Saikat Chakrabarti, exjefe de gabinete de la congresista progresista Alexandria Ocasio-Cortez.



