Educación financiera: entender para vivir más tranquila
A lo largo de mi vida he ido haciendo check en algunas de las áreas que se consideran importantes para disfrutar de la tranquilidad, con cierto grado de eficacia. He aprendido a alimentarme de manera saludable, hago ejercicio de forma regular y hasta me estoy instruyendo en el arte de la meditación. Una vez al año intento aprender algo nuevo, leo, disfruto del buen cine… pero, ¡ay!, en lo que a las finanzas se refiere, soy un verdadero desastre. Llevo años intentando ser responsable de mi economía, llevar un control de lo que gasto y lo que gano, manejar bien mis deudas, entender todos esos números que veo en mi hipoteca, aprender a ahorrar e incluso a invertir, sin éxito alguno. Todo se queda en buenas intenciones seguidas de un sentimiento de impotencia con cada fracaso.
Cuando escuché acerca de la importancia de alcanzar la libertad financiera y cómo debemos educarnos para ello, busqué ayuda y encontré a Patricia Caro, coach personal y ejecutiva que se dedica a divulgar sobre el bienestar financiero con una metodología propia, quien me explica que la clave está en gestionar el dinero de manera inteligente. “No solo se trata de números y cuentas bancarias. La educación financiera también involucra desarrollar una mentalidad consciente sobre el dinero, saber tomar decisiones informadas y, en cierto modo, buscar esa tranquilidad financiera que todos queremos”, me cuenta mientras reflexionamos en lo irónico que resulta que no la tengamos.
Finanzas: una asignatura pendiente
Caro habla de que en nuestra cultura, hablar de dinero sigue siendo un tabú o algo de menor importancia. Se asume que aprenderemos sobre la marcha o en la vida adulta, pero eso no siempre funciona. Añade, que “tradicionalmente, los sistemas educativos se han centrado más en habilidades académicas clásicas, y han dejado de lado aspectos prácticos como la gestión del dinero. Aunque esto está cambiando poco a poco, todavía hay mucho camino por recorrer”.
Al escucharla me doy cuenta de que no soy la única que piensa que ha nacido con cierta tara en lo que a las finanzas se refiere, e insiste en que es una creencia generalizada. “Con tantos términos técnicos, a veces parece que necesitas ser un experto para entenderlo todo. Eso puede desalentar a la gente de aprender. Pero esto no es cierto, porque por muchos productos y servicios que haya, para gestionar las finanzas personales, solo se necesita saber sumar y restar”, sentencia la experta.
Caro explica que los errores más habituales que ve en sus asesorías son:
