En general, las personas que practican deportes al aire libre son más sensibles al cuidado del medioambiente porque están en contacto permanente con la naturaleza. Sin embargo, su huella de carbono es un 40% superior a la de otros deportistas, según afirma la profesora Pamela Wicker en su artículo La huella de carbono de los participantes en deportes activos.
Esto se debe principalmente a la contaminación que generan los desplazamientos desde la ciudad, la degradación del hábitat natural de las especies salvajes y los recursos necesarios para llevar a cabo eventos masivos como las carreras de montaña.
Por eso, la Fundación Kilian Jornet ha lanzado la plataforma outdoorfriendly.org para promover una práctica del deporte al aire libre más sostenible. Allí se reúnen una serie de consejos y buenas prácticas que pueden ayudar tanto a eventos, marcas, federaciones y deportistas a reducir la contaminación.
Aquí te dejamos algunos consejos que cualquier corredor o corredora puede aplicar para reducir el impacto negativo del deporte en la montaña y contribuir con el cuidado del medioambiente.
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Reducir las emisiones por desplazamiento
La mayor parte de la huella ambiental que producen los corredores proviene de los desplazamientos y los viajes. Por ello, planear los viajes con anticipación y calcular su huella de carbono para elegir la opción menos contaminante es una buena forma de reducir nuestro impacto como corredores.
Limita al máximo los viajes de larga distancia, especialmente si es para una estancia corta. Intenta utilizar siempre medios de transporte de baja contaminación, como el transporte público, los vehículos compartidos o los vehículos eléctricos. Si viajas en coche, asegúrate de llenarlo para aprovechar el desplazamiento y si viajas en avión, evita los trayectos cortos y las escalas múltiples ya que el consumo de combustible es mayor en el despegue y el aterrizaje.
Existen varias aplicaciones que permiten calcular tu huella de carbono, como ésta.
Realizar compensaciones de carbono
La compensación de carbono no elimina las emisiones de dióxido de carbono que has producido, pero es una buena forma de tomar conciencia de nuestro impacto al calentamiento global y de apoyar acciones que reducen sus efectos. Esas acciones pueden ser plantar árboles, invertir en energías renovables, limpiar el agua, promover la agricultura sustentable, etc.
Esta calculadora permite calcular la huella de carbono y luego compensarla haciendo una donación a un proyecto que beneficie al medioambiente.
Promover la participación en carreras locales
Una forma fácil y simple de reducir la contaminación por viajes es participar en carreras y eventos locales que no impliquen grandes desplazamientos. Encuentra eventos y desafíos locales y compártelos con tus compañeros. En la medida de lo posible, utiliza el transporte público para ir a los eventos y si vas en coche asegúrate de compartir el viaje con otros asistentes.
Respetar las restricciones y recomendaciones locales
Algunas áreas tienen restricciones o recomendaciones para su preservación. Estas medidas tienen por objetivo minimizar la erosión del terreno, proteger a las especies silvestres y combatir la contaminación.
Algunas normas de sentido común pueden ayudarnos a cuidar el lugar, como por ejemplo no dejar nada de basura, no cortar ni dañar la flora, no molestar a los animales y no correr por lugares protegidos.
Sin embargo, cada región tiene sus particularidades según el clima y la época del año, por lo que es fundamental preguntar a las autoridades locales cuáles son las recomendaciones y restricciones y educar a las personas que no las cumplan.
Reducir, reutilizar y reciclar el equipamiento
Aquí la máxima que debe aplicarse es comprar menos, pero de más calidad para que dure más tiempo. Evita lavar demasiado los productos, ya que esto reduce su ciclo de vida y libera microfibras que contaminan el agua.
Haz un recuento de todo tu equipamiento para identificar lo que no estás usando y regalarlo, prestarlo o venderlo. Intenta reparar los productos en lugar de reemplazarlos. Cuando algo ya no puede usarse, deposítalo en el contenedor correspondiente. O incluso puedes darle un nuevo uso para el que no fue pensado inicialmente.
Verificar la huella ecológica de los productos
Antes de comprar un producto, revisa si la compañía tiene una política de sostenibilidad (puedes verlo en su página web). Verifica que el producto tenga su huella ecológica marcada y compra productos sin o con muy poco embalaje. No compres productos de plástico de un solo uso ni productos con substancias tóxicas.
Cuando compres algo por internet, es preferible recibirlo en un locker u oficina de correo antes que en tu domicilio. Elige productos que tengan un programa de economía circular para reutilizar todos los materiales después de que su ciclo de vida está agotado. Si compras vestimenta de algodón, intenta siempre que esté fabricada con algodón bio, ya que utiliza mucha menos agua y pesticidas que el algodón regular, y evita el poliéster, ya que este material viene del petróleo y libera microfibras en el agua cada vez que lo lavas.
Adoptar un estilo de vida amigable con el medioambiente
Cómo comemos, de dónde obtenemos la energía, dónde invertimos el dinero… Casi todo lo que hacemos tiene un impacto ecológico. Por eso es fundamental adoptar un estilo de vida sostenible.
Intenta comprar alimentos naturales, de temporada y de producción local, y reduce el consumo de carne, especialmente de carne roja. Reduce al máximo el desperdicio de comida.
Haz una auditoría energética de tu vivienda para saber cómo utilizar la energía de manera más eficiente. Aísla mejor tu casa para evitar la pérdida de temperatura y cambiaa las bombillas incandescentes (que desperdician el 90% de su energía en forma de calor) bombillas LED.
Ser un sujeto políticamente activo
La mayor parte de la contaminación y la emisión de gases de efecto invernadero no proviene de los individuos, sino de la industria y el agronegocio. Por lo tanto, debemos involucrarnos de forma activa en el debate público para que los gobernantes promueven leyes que protejan el medioambiente.
En este sentido, es importante informarse de las políticas locales y nacionales en materia ambiental y el posicionamiento de los candidatos sobre estos temas cuando hay elecciones. Hablar con familiares, amigos y conocidos sobre la importancia de tomar medidas contra el cambio climático e involucrarse con asociaciones que promueven prácticas sustentables puede marcar la diferencia en nuestro entorno.
