El mayor proveedor de alojamiento para niños inmigrantes no acompañados en Estados Unidos ha sido acusado de “abuso y acoso sexual severo, amplio e indeseado”, informó el jueves el Departamento de Justicia.
Una queja federal presentada en Austin, Texas, alega que empleados de Southwest Key, incluyendo supervisores, han abusados a niños bajo su cuidado desde por lo menos 2015. Las ofensas mencionadas incluyen violaciones, manoseos y el pedido de sexo y de fotos de desnudos.
Southwest Key, con sede en Austin, es el mayor proveedor de alojamiento para niños inmigrantes no acompañados y opera con financiamiento del Departamento de Salud y Servicios Humanos de Estados Unidos (HHS, por sus siglas en inglés).
La empresa opera 29 refugios para niños inmigrantes: 17 en Texas, 10 en Arizona y dos en California. Los niños que viven allí tienen edades de entre 5 y 17 años.
Entre las instancias de abuso que alega el Gobierno está el caso de un menor de 5 años en un refugio de Southwest Key en El Paso. En 2020, un empleado en un refugio de Tucson, Arizona, también llevó a un niño de 11 años a un hotel durante varios días y le pagó para que realizara actos sexuales, según el Departamento de Justicia.
De acuerdo con la queja federal, los niños fueron amenazados con violencia contra ellos o su familia si denunciaban el abuso. Y según testimonios de las víctimas, en algunos casos el personal sabía sobre los abuso mientras estaban teniendo lugar y no lo informó o lo ocultó.
El secretario de Salud y Servicios Humanos, Xavier Becerra, dijo el jueves que la denuncia “plantea serias preocupaciones sobre patrones o prácticas” dentro de las instalaciones de Southwest Key.
“El HHS tiene una política de tolerancia cero respecto a todas las formas de abuso sexual, acoso sexual, comportamiento sexual inapropiado y discriminación”, dijo Becerra en un comunicado.
The Associated Press dejó un mensaje a la compañía en busca de comentarios el jueves.