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Después de todos los problemas que le trajo a comienzos de este año, el delantero francés sigue sin darle alegrías al Muñeco.
Desde que Marcelo Gallardo llegó a Arabia Saudita, lejos de lo que podía pensarse, ha tenido varios problemas con quién debería darle más soluciones que nadie: Karim Benzema. Con una relación muy difícil, el Muñeco aún no logra disfrutar del Gato. Ya sea en su relación o en lo futbolístico.
En un partido muy importante porque puede dejar al equipo de Gallardo cerca del tercer puesto, Benzema volvió a fallarle a Gallardo al errar un penal determinante en el cruce del Al Ittihad contra Al Feiha cuando este estaba igualado en cero.
Con un tiro débil al palo derecho del arquero, el delantero francés no solo desperdició su chance de abrir el marcador, sino que también no supo aprovechar el rebote que fue despejado por la defensa. De esta manera, el encuentro estuvo en cero hasta el gol de Sabiri (Al Feiha) tan solo cinco minutos después. Vale destacar que el equipo de Gallardo logró darlo vuelta el resultado.
Los pésimos números de Benzema desde que llegó Gallardo
Con 9 goles convertidos en 13 partidos antes de la llegada de Gallardo al equipo, Karim Benzema venía atravesando una gran temporada. Sin embargo, desde que el Muñeco asumió en los tigres sus números cambiaron rotundamente; ya sea en tantos convertidos como en partidos jugados.
Con diez encuentros bajo la dirección técnica del Muñeco, Benzema no pasa un buen momento ya que solamente convirtió tres goles: uno por la liga saudí y dos en el Mundial de Clubes. Además, no dio asistencias a sus compañeros.
La disputa entre Benzema y Gallardo a comienzos del 2024
Inconforme con algunas decisiones del DT argentino, Karim Benzema quiso forzar su salida del club en enero de este año, ausentándose de los entrenamientos en la pretemporada. Una decisión que no cayó nada bien en un Gallardo que tomó cartas en el asunto.
Tras separar al goleador francés del plantel y mandarlo a entrenar diferenciado, Gallardo tuvo varias reuniones con los dirigentes del club porque los propietarios del Al Ittihad buscaron a toda costa mantener a las dos figuras por el bien del proyecto.
