Uno de los problemas principales al hacer dieta es la sensación de hambre, que puede llevar a consumir una mayor cantidad de comida de la que se debería. Sin embargo, hay un truco para luchar contra ese contratiempo, se trata de los alimentos saciantes.
Tal y como recoge el sitio web del Centro Integral de Nutrición de Islas Baleares (CINIB), para ajustarse al plan dietético pautado por un profesional no solamente es importante centrarse en disminuir en consumo de calorías diarias.
También se debe “minimizar la sensación del apetito mediante una pauta dietética que incorpore alimentos saciantes y disminuya la sensación de hambre continua”, destaca el CINIB.
De hecho, el organismo añade que esa sensación “suele ser la principal causa de abandono de las dietas o la que hace que las mismas no puedan mantenerse de modo prolongado”.
El alimento ideal para saciarte
En ese sentido, Susanne Holt, del departamento de Bioquímica de la Universidad de Sydney (Australia), elaboró en el año 1995 un estudio que abordaba la saciedad de diferentes alimentos. En concreto, se analizaron 38 alimentos diferentes, con la misma cantidad de calorías y se valoró la saciedad temprana y pasadas 2 horas desde la ingesta.
La investigación, publicada en la revista científica European Journal of Clinical Nutrition, concluyó que la patata cocida es el alimento más saciante con mucha diferencia respecto al resto de comidas estudiadas. Un ejemplo es que la patata cocida es hasta 7 veces más saciante que un croissant o un pastel.
El estudio elaboró un índice de saciedad en el que la patata cocida alcanza el 323%. Le siguen el pescado (225%), la harina de avena o avena (209%), las naranjas (202%), las manzanas (197%), las pastas integrales (188%) y la carne de vacuno (176%).
