El consumo de legumbres aporta valor nutricional a las dietas, pues al ser fuente de fibras y nutrientes generan sensación de saciedad. Además, que son naturalmente bajas en grasas, “prácticamente no contienen grasas saturadas y, al ser alimentos vegetales, tampoco contienen colesterol”.
Las legumbres son altamente nutritivas, ricas fibras, proteínas, carbohidratos, vitaminas del grupo B, hierro, cobre, magnesio, manganeso, zinc y fósforo.
Una muestra del valor nutricional de las legumbres, lo observamos cuando rencontramos que media taza de legumbres, aporta 115 calorías, 20 gramos de carbohidratos, 7 a 9 gramos de fibra, 8 gramos de proteína y 1 gramos de grasa, indica un estudio publicado por el Centro Nacional para la Información Biotecnológica (NCBI).
Otras de las ventajas de las legumbres es que tienen un índice glucémico bajo, que se calcula entre 10 y 40.
El estilo de alimentación mediterráneo, el plan de alimentación DASH, las dietas vegetarianas y veganas y las dietas con un índice glucémico (IG) más bajo, incluyen las legumbres dentro de los alimentos recomendados.
Las investigaciones evidencian que este alimento nutritivo “desempeña un papel importante en la prevención y el tratamiento de una serie de afecciones de salud”.
Pese a los beneficios “el consumo de legumbres, solo alrededor del 8% de los adultos estadounidenses informan comer legumbres en un día determinado”, indica el NCBI.
5 legumbres que ayudarán a bajar la grasa abdominal.
Las legumbres, también llamados frijoles, son semillas comestibles y nutritivas en forma de vainas dentro de la familia de las leguminosas, y hay una gran variedad como los frijoles rojos, blancos, habas, negros, pintos, de soja, garbanzos y lentejas, entre otros.
Incluir el consumo de legumbres en la alimentación habitual puede ayudar a mantener el peso y a prevenir enfermedades.
De la gran variedad de legumbres, hay cinco pueden ayudar a reducir la grasa abdominal, de acuerdo a un trabajo publicado por Vitónica.
Maní: aporta proteínas vegetales que ronda el 30%, además de una elevada proporción de grasas insaturadas que ayudan al cuerpo. Se caracteriza por ser una legumbre oleosa y por ser el ejemplar con menor proporción de hidratos en su interior.
Entre los beneficios del maní tenemos que, es fuente de fibra, lo que contribuye a generar sensación de saciedad. Un estudio de la Universidad de Houston concluyó que el consumo de esta legumbre puede ayudar a prevenir la obesidad y a controlar la grasa corporal, cita Vitónica.
Soja: es fuente de proteína vegetal de alta calidad, tanto el grano como sus derivados. La soja aporta “compuestos fenólicos con acción antioxidante y antiinflamatoria en nuestro organismo”.
Al tener una alta concentración de proteínas es efectiva para generar saciedad, y de esta manera lograr un déficit calórico para adelgazar. Mientras que “la sustitución de comidas por platos a base de proteína de soja puede promover el adelgazamiento y aliviar la obesidad”, refiere Vitónica.
Garbanzos: son una de las legumbres más populares, y consumida por los habitantes de las Zonas Azules. Además, son ricos en fibras, proteínas vegetales, minerales y vitaminas del grupo B.
También contiene minerales como el potasio, magnesio y compuestos fenólicos, ayudan a la salud intestinal, puesto que tiene un efecto prebiótico en nuestro intestino. Mientras que estudios realizados con roedores han demostrado sus efectos hiperlipidémicos.
Judías blancas, negras o pintas: son una de las legumbres con cantidad de proteínas y bajas en hidratos de carbono en comparación con otras legumbres. Entre los beneficios de su consumo destaca mejorar el funcionamiento del metabolismo, reducir la inflamación en nuestro cuerpo y mejorar la composición corporal.
Habas secas: son ricas en proteínas y en fibra, lo que las convierte en una de las alternativas para lograr la saciedad a la hora de hacer dietas para alcanzar déficit calórico para quemar grasas y adelgazar.
Es importante recordar que los médicos y especializas coinciden en afirmar que los beneficios nutricionales y la mejoras de ciertas condiciones no se logran con un solo tipo de alimentos, sino que se deben acompañar con un conjunto de hábitos de vida saludable, hace ejercicios, hidratarse y seleccionar.
Sigue leyendo:
