A propósito del inicio de la Semana Santa, el cardenal Luis José Rueda Aparicio, presidente de la Conferencia Episcopal, propone a todos los creyentes cinco consejos para vivir una Pascua llena de reflexión y de crecimiento espiritual.
La importancia del perdón
Es necesario que busquemos en Jesús el perdón y que aprendamos de Él a perdonar a quienes nos hacen daño, a quienes nos persiguen, porque el sacrificio que hizo en la cruz, y que conmemoramos estas fechas, fue por el perdón nuestro.
Aprendamos de Jesús a orar
Lo veremos en el huerto de Getsemaní, lo veremos en oración permanente. Y este es el año de la oración como lo ha querido el papa Francisco. Por lo tanto, intensifiquemos nuestra participación en los templos y también en la vida de oración de nuestros hogares.
Tomemos la Biblia en nuestras manos
Es necesario que la llevemos a nuestro corazón, de tal manera que siguiendo los textos que nos propone la Iglesia, nosotros crezcamos en el conocimiento de Cristo a través de la Sagrada Escritura.
Vivamos la vida sacramental
Esto es muy importante en la Semana Santa, porque es a través de los sacramentos que recibimos la gracia, el sacramento del perdón, el sacramento de la Eucaristía y así se renueva nuestra condición bautismal.
Compromiso con el servicio misionero
Hay alguien que necesita que le anunciemos con la vida, con el testimonio de que Cristo murió y Cristo resucitó. La Semana Santa es cuando se materializa el milagro redentor de nuestro salvador, nuevas que, como cristianos, tenemos que compartir.