Esteban Ocon vio como después de la temporada 2018 de la Fórmula 1, su lugar en el equipo Racing Point no estaba asegurado y fue despedido quedándose sin asiento en la estructura británica de cara a la temporada 2019. El francés, uno de los mayores talentos de la parrilla, se veía sin asiento y tenía que conformarse con ser piloto reserva de Mercedes durante ese año antes de afrontar una nueva etapa como piloto de Renault en 2020.
El piloto francés de 27 años recuerda el inicio de aquella temporada 2019, en un Gran Premio de Australia que exhibió la nueva fortaleza del equipo Mercedes y también la energía renovada de un Valtteri Bottas que golpeó con fuerza al inicio de año, estando recién renovado y quitándole su posible lugar como piloto titular dentro del equipo Mercedes. Eso le hizo afrontar 2019 como piloto reserva, sin pilotar y con un año por delante muy duro para él, ya que se veía en 2019 como piloto titular de Mercedes con un monoplaza que era realmente rápido y dominador.
“Al llegar a la primera carrera en Australia y hablar con Mercedes sobre cuándo iba a probar el coche, me dijeron: ‘Oh, sí, vas a realizar la prueba en tres o cuatro meses’. Luego volví al coche y lloré en el parking, lo recuerdo. Por suerte encontramos la solución para volver. Creo que ese fue el [momento] más bajo, Australia, 2019. Estaba muy feliz por el equipo y también por el éxito que estaban teniendo porque yo era parte de eso, estaba contribuyendo con el trabajo del simulador. Pero pensé: ‘¿Qué pasaría si yo también pilotara ese coche en carrera?’ Es tan dominante, es tan rápido. Me veía a mí mismo, pero no estaba ahí, en la pista y eso fue bastante duro”, comenta Esteban Ocon.
