
Foto: Captura de Pantalla
A través de redes sociales, Sofía Figueroa Álvarez, una exservidora pública de Guadalajara, Jalisco, confesó que sacrificó a un perrito en nombre de la religión que practica.
La exfuncionaria realizó un video en vivo para platicar con sus seguidores y durante la conversación, la joven aconsejó a la gente practicar la religión de los orishas.
“Si son de las personas que les encanta saber qué va a pasar o que alguien los está guiando en su vida para poder hacer las cosas bien, metanse, se los recomiendo 100%”, manifestó Sofía.
La religión a la que hace referencia la joven se llama Yoruba, cuyas deidades principales se denominan orishas. Esta práctica es de origen africano pero se ha extendido a latinoamérica y está relacionada con la santería.
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Sacrificó a un perro
Durante el video, la joven confesó que el sacrificio que hizo fue grande porque vio cómo le quitaban la cabeza a un perro.
“Yo por ejemplo tuve que hacer un sacrificio muy grande, muy culero, porque le cortaron a un perro… para que me quitaran a mis enemigos del camino”, recalcó.
Figueroa Álvarez explicó que el precio económico en esta religión es elevado, pero que “vale la pena porque los Orishas saben muy bien qué va a pasar contigo”.
“Es una religión que más adelante te va a dar más”, detalló Sofía.
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No es funcionaria
Tras viralizarse el video de Sofía, en el que primero se dijo que era funcionaria en activo, el ayuntamiento de Guadalajara dio a conocer que la joven ya no laboraba en el lugar.
“Fue una trabajadora eventual que sólo laboró en el municipio por 72 días. Al momento de darse a conocer el video, ya no existía relación laboral alguna”, se lee en la tarjeta informativa del municipio.
El gobierno reafirmó en su redacción su postura acerca del respeto a los derechos de los animales.
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¿Qué castigo puede recibir Sofía?
De acuerdo con el artículo 306 del Código Penal de Jalisco, la exfuncionaria puede ser sancionada con 3 a 5 años de prisión y multas de hasta 113 mil pesos por maltrato y asesinato animal.
También se contempla trabajo comunitario como medida adicional.
Por otra parte, la Ley de Protección y Cuidado de los Animales del Estado de Jalisco prohíbe el uso de seres sintientes en rituales que impliquen dolor o muerte innecesaria.
A pesar de que Sofía argumenta “actos religiosos”, la legislación estatal no reconoce como válidos estos actos.