Pionera y un ejemplo para las nuevas generaciones, así se resume la vida Hermelinda Sapien que marca historia al sur de la Bahía.
Por décadas ha dirigido el Centro para el Entrenamiento del Trabajo (CET, por sus siglas en inglés), fundado en 1967, donde muchos hispanos han sido estudiantes a los que les ayudó a estudiar nuevas carreras para un mejor futuro.
“Era difícil, porque en un mundo donde yo entré había puros hombres. Yo fui la primera mujer en una mesa directiva muy importante de California, la cooperativa campesina de california, y tuve que aprender respetuosamente a interrumpir porque si no lo hacía pues nunca me dejaban hablar, verdad”, explicó Hermelinda.
Pero Hermelinda aseguró que ser la única mujer no la intimidó, si no que le dio fuerzas para seguir adelante.
Y es que, en su momento, recibió apoyo del líder de los derechos de los campesinos Cesar Chávez, a quien consideró su amigo. De él aprendió a luchar por los menos favorecidos.
“Cesar, Antonio Soto, muchos de los líderes que yo tuve contacto con ellos durante mi desarrollo fue tremendo. Fueron los mejores, los que abrieron la oportunidad. Cesar fue un gran líder que yo admiraba y le ponía mucha atención a todo lo que decía, era una mente brillante y trato de emular eso”, aseguró Hermelinda.
En el CET, estas personas aprenden las técnicas para convertirse en electricistas.
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El centro juega hoy un papel tan importante como cuando lo hizo durante la gran recesión, cuando los estadounidenses desempleados decidieron aprender un nuevo oficio con la esperanza de volver a trabajar.
“Los estamos formando muy bien, de hecho, estamos superando nuestras expectativas de formación”, indicó Larry Tumale, instructor del CET.
En la actualidad el CET tiene 11 centros distribuidos en todo el país, con formación en carreras médicas, cuidado de niños y oficios varios.
Sus programas han transformado vidas incluidas las de los trabajadores agrícolas que buscan un camino para salir de los campos y tener mejores carreras, y con eso una mejor remuneración.
“Tratar a todos bien y con la expectativa de tratarlos y motivarlos a acercarse más a una carrera que escojan”, dijo Ed Romero, trabajador en CET.
Filosofía que Hermelinda ha luchado por que se cumpla en la institución que después de 55 años afirmó llegó el momento de permitir que alguien más continúe su legado.
“Llegó el momento para que otra persona aporte nuevas ideas, formas innovadoras que inspiren el trabajo del CET y con esto crear una nueva visión”, aseveró Hermelinda.
Su retiro del CET, no significa que Hermelinda abandone su lucha pues aseguró que siempre estará al frente de causas donde los débiles necesiten tomar fuerza, y tiene un mensaje para la comunidad latina y las mujeres.
“Podemos lograr lo que nos proponemos”, añadió Hermelinda.
