La Conselleria de Medio Ambiente continúa con la investigación abierta por el incendio en la planta de tratamiento de residuos de San Antonio de Requena, que sigue activo tras declararse el pasado 15 de abril. Según la consellera de Medio Ambiente, Agua, Infraestructuras y Territorio, Salomé Pradas, tras recopilarse toda la información en el expediente y decretarse la suspensión cautelar de la actividad la pasada semana, la Dirección General de Calidad y Educación Ambiental implementará otros dos expedientes que pueden “llevar al cierre definitivo” de la instalación propiedad de la empresa Econova .
Tras la reunión mantenida con la alcaldesa de Requena, Rocío Cortés, el alcalde de Utiel, Ricardo Gabaldón, y representantes vecinales, la titular del departamento medioambiental ha explicado que el primero de los expedientes, uno sancionador, ya se ha comenzado a tramitar. En el mismo, se han incorporado los antecedentes de la empresa y se ha procedido a la apertura de la fase de actuaciones previas para recopilar todos los datos de la propia Conselleria de Medio Ambiente, así como de otros departamentos implicados.
Este proceso finalizará una vez se pueda incorporar toda la documentación relativa al incendio una vez esté extinguido. Por otro lado, se va a abrir otro expediente por incumplir la Ley de Responsabilidad Medioambiental. Tal como informó Levante-EMV, la firma ya fue denunciada por la Generalitat Valenciana al incumplir diversos preceptos de esa misma ley. El expediente se cerró en junio de 2023 tras haber subsanado los incumplimientos, pero la sanción económica interpuesta por parte de la Conselleria de Medio Ambiente no se ha abonado. Según la investigación, Econova podría haber vuelto a incurrir en los mismos incumplimientos que cuando fue sancionada: acumular más toneladas de residuos de las que era capaz de gestionar y de las que indica la norma autonómica.
La titular de Medio Ambiente ha destacado este martes que “tras las irregularidades detectadas y la suspensión cautelar de la planta se está recopilando la información en unas diligencias preliminares que pueden conllevar el cierre definitivo de la instalación”.
La alcaldesa de Requena ha agradecido la colaboración de la Generalitat y de los efectivos de Emergencias y ha expuesto que “estarán al lado” de las dos plataformas vecinales, al tiempo que ha indicado que “todo va mucho mejor de lo esperado y esperemos que en breve el incendio esté controlado y volver a la vida normal”.
Pradas también ha trasladado un mensaje de tranquilidad a los vecinos de Requena y Utiel porque las mediciones que se realizan a diario determinan que no hay riesgo para la población de los municipios. La consellera ha recordado que, desde el primer momento, la conselleria “ha tratado de respaldar a los vecinos en la medida de sus posibilidades y competencias”.
Desde la Dirección General de Calidad y Educación Ambiental, una vez confirmado que el incendio no se sofocaría de forma rápida, se procedió a instalar una unidad móvil para hacer un análisis continuo de la calidad del aire. “Las muestras siempre han confirmado que no hay un peligro para la población”, insistió.
Así arde la planta de reciclaje de Requena / Levante-EMV
Las autoridades también establecieron pautas de comportamiento para los colectivos más vulnerables, como el uso de mascarillas o el confinamiento de los niños y niñas en los colegios, para que no salieran al patio de recreo. Pradas ha querido agradecer a los vecinos y alcaldes su actitud, siguiendo las recomendaciones dadas desde la Conselleria de Medio Ambiente y del ayuntamiento. A su vez, ha recalcado que la Generalitat “se sensibiliza con los vecinos de las poblaciones y va a seguir a su lado”.
Anteponer los intereses de los vecinos
“La Generalitat se ha adelantado y ha tomado estas medidas porque antepone los intereses de los vecinos de Requena y Utiel ante los de una empresa desaparecida y a la fuga que ha realizado incumplimientos que pueden haber llevado a que se produjera el incendio”, ha destacado la consellera. “El objetivo es depurar al máximo las responsabilidades de la empresa, que por mucho que haya desaparecido sigue existiendo, y determinar si se han hecho bien las cosas y se cumplía toda la normativa”, ha recalcado Salomé Pradas.
En este sentido, ha adelantado que se ha solicitado a la empresa que recoja todos los residuos de la planta una vez finalizada la extinción. En caso de que no se produzca este trabajo, la Generalitat lo llevaría a cabo en ejecución subsidiaria. a planta incendiada hace ahora catorce días tenía capacidad para tratar 99.500 toneladas de residuos no peligrosos cada año. Eso se tradujo, en la práctica, en que la empresa Econova repartía todos esos materiales en grandes montañas de hasta 7 metros de altura, que poblaban su parcela de 48.000 metros cuadrados
Colaboración de la CHJ
Asimismo se solicitó la colaboración de la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ) para que lleve a cabo sus propios controles en acuíferos, pozos y cauces próximos a la planta. El Consorcio de Bomberos de Valencia, en coordinación con los ayuntamientos, solicitó la movilización de maquinaria pesada para intensificar los trabajos de extinción del incendio. Se han suministrado 3.000 toneladas de tierra.
Este fin de semana puede estar extinguido
El incendio se inició en la planta de reciclaje el pasado 15 de abril y desde entonces continúa activo. Los trabajos de extinción han tenido dos fases diferenciadas: durante la primera, que se alargó hasta cinco días, los efectivos del Consorcio hicieron frente al incendio con los medios habituales, para pasar a una segunda fase en la que se hizo necesario el trabajo con maquinaria pesada.
Así, los bomberos del cuerpo provincial mantienen en este segundo período un dispositivo preventivo que estará presente mientras se efectúen los trabajos de volcado de tierra sobre la materia incendiada que se llevan a cabo a través del Centro de Coordinación de Emergencias de la Generalitat.
Los efectivos de Emergencias y de extinción prevén que los trabajos para poder dar por extinguido el fuego concluyan durante este fin de semana al poder cubrir todos los restos y residuos con tierra en una superficie de 45.000 metros cuadrados.
