El plenario municipal ha dado luz verde a la propuesta de concierto social de los programas de dinamización del Área de Bienestar Social, la cual se aprobó por unanimidad.
Se trata de un cambio de modelo impulsado desde el área de Bienestar Social, con lo cual ciertos programas, empezando por los de atención a personas grandes o enfermos mentales, pasarán a gestionarse a través de un concierto con una entidad del tercer sector, una fundación o una asociación sin ánimo de lucro. De este modo, en la hora de contratar el servicio no primarán los criterios económicos con una oferta a la baja, sino los criterios relacionados con las mejoras de los servicios de carácter social.
Para tal fin, se ha aprobado un gasto de más de 150.000 euros, repartida en tres anualidades: 12.586,88 euros en 2024, 75.521,22 euros en 2025 y 62.934,34 euros destinados en 2026.
“Esta es una propuesta nueva con la cual se cambia el modelo de contratación en Bienestar Social, primando la mejora de la atención a los servicios por ante el precio de los contratos. Iniciamos esta nueva modalidad, de manera piloto, con los contratos que afectan a las personas mayores y a las personas con enfermedad mental, e iremos sumando el resto de programas despacio”, ha explicado la regidora de Bienestar Social Xelo Angulo.
Los programas con los cuales se empezará con este nuevo modelo son el programa Mentalis de estimulación cognitiva, afectiva y social destinado a personas mayores de 65 años que presentan deterioro cognitivo y una carencia de rutinas y contacto social, con el objetivo de promocionar su autonomía personal (y con el cual se trabaja actualmente con borde 200 personas grandes junto con sus familias); y también con el programa SASEM de apoyo al servicio de atención específica para personas con problemas crónicos de salud mental. También se sumarán los programas de atención y participación de personas mayores destinados a organizar actividades de fomento de la convivencia y del espaldarazo comunitario (taichí, ambientación musical y bailes de salón).
“Estos programas apoyan a un servicio muy importante de atención específica para personas mayores y para personas con enfermedad de salud mental crónica, y esperamos poder empezar este nuevo modelo de contratación, bajo el paraguas de contratación responsable y social, el próximo mes de octubre”, ha puntualizado Angulo.
Los conciertos tendrán una duración de dos anualidades (con posibilidad de prórroga por dos años más), y a la finalización de la prestación del servicio de cada uno de los programas, la entidad concertada tendrá que realizar una evaluación del proyecto o un plan de trabajo desarrollado, teniendo que elaborar una memoria sobre el servicio prestado.
