La eliminación ante el PSG fue un duro golpe para la afición del FC Barcelona. Por primera vez en años, la gent del Barça se había vuelto a ilusionar con las posibilidades del equipo en Europa, y más con el buen resultado cosechado en la ida en París con un inesperado 2-3 a favor de los azulgranas.
La realidad, sin embargo, fue muy cruel para los azulgranas. La expulsión de Araujo, con un ilusionante 1-0 a la media hora de partido, dinamitó por los aires todo el plan de partido culé, que acabó sucumbiendo ante el poderío táctico e individual del PSG.
En este último aspecto, brilló especialmente Osumane Dembélé. El ex del Barça, protagonista en la previa por la dureza con la que lo recibió Montjuïc por su gol en la ida y sus celebraciones en los dos goles de los parisinos, dio la puntilla a su exequipo.
El francés fue el autor del empate pocos minutos antes del descanso y provocó el penalti del 1-3 que daba la vuelta al marcador, ganándose el honor de recibir el ‘MVP’ del partido sobre el césped del Estadi Olímpic, un premio que sentó como una puñalada entre los asistentes y espectadores culés que seguieron el partido desde casa.
Por si el ‘MVP’ del partido no fuera poco, la Champions League ha dado un nuevo ‘guantazo’ al FC Barcelona con la elección de Dembélé como jugador de la semana de los partidos de vuelta de cuartos de final, un gesto doloroso teniendo en cuenta que, hasta la eliminatoria contra el Barça, el que fuera extremo culé durante seis temporadas tan solo había marcado un gol en nueve meses de competición.
