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La empresa Mitsubishi Corporation de Japón recibió autorización del Gobierno cubano para fabricar y comercializar los productos de su cartera, que van desde automóviles hasta alimentos, bebidas y materias primas.
La firma nipona contaba desde hace años con una limitada presencia en Cuba, que ahora se amplía considerablemente gracias la Resolución 107/2024 del Ministerio de Comercio Exterior y la Inversión Extranjera, que le permite su inscripción en el Registro Nacional de Representaciones Comerciales Extranjeras.
Giro comercial después de años de solicitud
Diversas fuentes indican que el conglomerado japonés presentó hace cuatro años la solicitud para extender sus operaciones en Cuba, las que se verán beneficiadas con la inclusión en el registro adscrito a la Cámara de Comercio.
En ese sentido, la resolución indica que “el giro comercial” de la oficina de representación de Mitsubishi, a partir de su inscripción, “es la fabricación y comercialización de productos terminados para diferentes sectores de la industria y la economía, incluido los alimentos, bebidas, materias primas diversas, equipos, equipamientos, accesorios, partes y piezas variados; así como realizar actividades de intermediación en la actividad de exportación e importación”.
No obstante, la resolución deja establecida algunas limitaciones para las futuras operaciones de Mitsubishi en la isla. De momento, no podrá importar y exportar directamente con carácter comercial, ni realizar el comercio mayorista y minorista en general de productos y servicios, excepto los servicios de posventa y garantía, expresamente acordados en los contratos que amparan las operaciones de comercio internacional.
Tampoco contará con la autorización para emitir facturas comerciales o distribuir y transportar mercancías en el territorio nacional.
Presencia en la banca y otras industrias
Mitsubishi Corporation desarrolla sus actividades comerciales en diferentes sectores, aunque es más conocida por su participación en el sector automotriz. Además, tiene presencia en la banca, e incursiona en el ámbito de las industrias de energía, química, eléctrica, militar, minería, construcción naval y telecomunicaciones.
Junto con la empresa japonesa recibieron el permiso de inscripción en el registro comercial cubano otras entidades de diferentes países enfocadas en ramas diversas de la economía.
En el listado aparecen las españolas Drizoro S.A. y Madrid Hostelería de Suministros de Hostelería, la primera dedicada a fabricación y comercialización de materiales de construcción. También recibieron luz verde la empresa panameña Beta Music SAS S.A., la canadiense AVSUP Inc. y Líneas Aéreas de Angola (TAAG), entre otras.
