Categoria:

Otro error de Jurasic Park: El Tiranosaurio rex no era tan listo como creíamos

Autor: Javier Pelaez

La fiebre de los dinosaurios ha tenido dos momentos decisivos que lograron atrapar y deslumbrar al público. El primero de ellos ocurrió a principios del siglo XIX, en los inicios de la paleontología moderna, cuando los naturalistas comenzaron a descubrir, analizar y catalogar los huesos que iban apareciendo. La sociedad decimonónica quedó fascinada por aquellos gigantes pero, poco a poco, el tirón mediático fue perdiendo fuerza con los años. El segundo empujón a su popularidad llegó de la mano de la ciencia ficción. La literatura, las series y especialmente el cine consiguieron que los grandes saurios recuperaran su fama, sobre todo con películas como Jurasic Park (1993) que terminó convertida en una saga de varias entregas con millones de espectadores en la gran pantalla. La imagen que muchos tenemos de los dinosaurios se ha visto fuertemente influenciada por lo que el cine nos ha mostrado y, de vez en cuando, nos olvidamos que el cine… es solo cine.

Fotograma de la película Jurasic Park (1994)

Fotograma de la película Jurasic Park (1994)

Existen docenas de webs dedicadas a explicar los numerosos errores científicos en el séptimo arte, es un ejercicio de divulgación divertido, ameno y, en muchas ocasiones, bastante útil porque utiliza ejemplos que todos conocemos para explicar conceptos que de otro modo resultarían más complicados. Las películas de Jurasic Park son especialmente interesantes en este sentido ya que, durante varias generaciones, han popularizado una idea de los dinosaurios que, a menudo, suele estar muy alejada de lo que la paleontología ha ido descubriendo en estos años. El ejemplo de las plumas en muchas especies de dinosaurios es quizá el más conocido pero, dentro de la comunidad científica especializada, existe un intenso debate sobre la verdadera inteligencia del rey de los dinosaurios, el Tyrannosaurus rex.

Hace algunos meses, se publicó un estudio que analizaba las habilidades cognitivas del T. rex encontrando “un número excepcionalmente alto de neuronas en el cerebro”. Sus autores explicaban que “había tantas neuronas en el cerebro de este terópodo que podría haber sido tan inteligente como un babuino, que podría transmitir culturalmente conocimientos e incluso utilizar herramientas”. Aquel trabajo científico despertó bastante interés y generó portadas con titulares algo arriesgados equiparando la densidad neuronal del Tiranosaurio a la de los primates modernos. Por fin un estudio que daba la razón a las películas de Parque Jurásico en donde algunos dinosaurios, como los velociraptores, mostraban capacidades cognitivas avanzadas como abrir puertas o trazar planes complejos de caza. Sin embargo este artículo se consideró demasiado provocativo y fue recibido con escepticismo en la comunidad científica. Muchos esperaban la publicación de nuevos trabajos que rebatieran esa idea y, hace tan solo unos días, ha aparecido la respuesta.

Tamaño relativo estimado del telencéfalo y el cerebelo en T. rex, en comparación con otros saurópodos y aves | Caspar, Kai R., et al. BioRxiv (2024)

Tamaño relativo estimado del telencéfalo y el cerebelo en T. rex, en comparación con otros saurópodos y aves | Caspar, Kai R., et al. BioRxiv (2024)

Un equipo internacional de científicos que incluye a dos neurobiólogos de la Universidad de Alberta ha publicado un nuevo estudio en Anatomical Record en el que afirman que las capacidades cognitivas del T. rex se han sobrevalorado. “Había mucha gente que pensaba que era necesario aclarar las cosas”, explican los autores. “Especialmente porque al aparecer en prensa se corría el riesgo de terminar con esa idea popular del que el T. rex era super inteligente, usaba herramientas, tenía cultura y dices ¡Guau!”.

En el estudio publicado el equipo descubrió que “las suposiciones anteriores sobre el tamaño del cerebro de los dinosaurios y la cantidad de neuronas que contenían no se ajustan a la realidad. La investigación resume décadas de análisis y estudios paleontológicos para afirmar que “se ha sobreestimado el tamaño de su cerebro (especialmente el del prosencéfalo) y, por tanto, también el número de neuronas”. Por otro lado, muestran que las estimaciones del recuento de neuronas no son una guía fiable de la inteligencia.

“La posibilidad de que el T. rex haya sido tan inteligente como un babuino es fascinante y aterradora, y tiene el potencial de reinventar nuestra visión del pasado”, afirman en Phys.org. “Pero nuestro estudio muestra cómo todos los datos que tenemos van en contra de esta idea. Se parecían más a cocodrilos gigantes, y eso no le quita interés ya que es igualmente fascinante”.

  • TAMBIÉN EN VIDEO: Una excavación en Wyoming revela un descubrimiento pionero sobre los Triceratops

Referencias científicas y más información:

Caspar, Kai R., et al. «How Smart Was T. rex ? Testing Claims of Exceptional Cognition in Dinosaurs and the Application of Neuron Count Estimates in Palaeontological Research». The Anatomical Record (2024) DOI: 10.1002/ar.25459.

Caspar, Kai R., et al. “How Smart Was T. Rex? Testing Claims of Exceptional Cognition in Dinosaurs and the Application of Neuron Count Estimates in Palaeontological Research” BioRxiv (2024) DOI:10.1101/2024.01.10.575006.

Don Bell, Alberta University “T. rex not as smart as previously claimed, scientists find” Phys.org

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Te puede interesar también

¿Quieres hablar con nosotros en cabina?

Nuestros Horarios en el Estudio:

9am a 11am | 12m a 1pm | 4 a 5 pm | 5 a 6pm

horario del pacifico