El bed rotting es una nueva práctica que consiste en quedarse voluntariamente en la cama en lugar de ser productivo. Sí, así como lo oyes. Entonces, ¿es una costumbre poco saludable o un verdadero método de relajación? Algunos especialistas en salud han abordado la cuestión y le dan respuesta a muchas de las interrogantes que han surgido alrededor de esta nueva tendencia que todos los días sigue ganando adeptos en TikTok.
¿Qué es el bed rotting?
Nada como un descanso reparador y dedicar un tiempo a uno mismo.
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Contrario a los entrenadores de vida que nos instan a ser productivos incluso en nuestros momentos de descanso, el bed rotting, que literalmente significa en español “pudrirse en la cama”, es una invitación a utilizar el día para nosotros mismos. Una práctica que se inscribe en un enfoque individualista, y nos invita a tomar tiempo para dedicarnos a la lectura, a nuestros pasatiempos favoritos (ver películas o series, jugar videojuegos, leer un libro) y a holgazanear todo el día en nuestra habitación.
¿Es malo el bed rotting?
La psicoanalista Chantal Pironi indicó a nuestros colegas de Le Parisien que “esta práctica puede tener sus beneficios”, señalando que “no tener nada que hacer después de una semana estresante, corriendo por todas partes, puede ser reconfortante y necesario”. Sin embargo, advierte que el bed rotting puede ser un “síntoma de depresión si se asocia con otros signos como la pérdida de interés en actividades que suelen ser agradables”. Es el caso, por ejemplo, si no disfrutas viendo tu serie favorita en la cama. “Los adeptos al bed rotting tienden a solo deslizar sus dedos en sus teléfonos”, explica la psicoanalista: ahí está el peligro, ya que esto puede aumentar el riesgo de demencia y depresión.
Lo más importante es escuchar a tu cuerpo
Aunque el bed rotting puede parecer tentador como forma de relajación, puede tener efectos negativos significativos en la salud física y mental.
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Si el sueño y el descanso son necesarios para mantener una buena salud, especialmente en casos de agotamiento, el exceso de reposo también puede ser perjudicial. Según Saverio Tomasella, doctor en psicología y psicoanalista, “la falta de movimiento no es buena. El ejercicio físico, preferiblemente al aire libre, es lo mejor para la salud”. De hecho, esto es lo que recomienda la OMS para reducir los riesgos de ansiedad, depresión y aislamiento. “Después de un tiempo, un cuerpo inactivo se vuelve letárgico. Creemos que estamos cansados, pero es una falsa sensación de fatiga, una especie de pesadez, de apatía que se desarrolla”, insiste la especialista en Ouest France.
En resumen, el descanso es necesario y bienvenido después de días de trabajo intenso o fatiga acumulada, sin embargo, no se debe abusar de él. Aunque el bed rotting puede parecer tentador como forma de relajación, puede tener efectos negativos significativos en la salud física y mental. La falta de actividad física puede llevar a problemas como la obesidad, enfermedades cardiovasculares y musculares, e incluso afectar la calidad del sueño. Además, el aislamiento social (con la pandemia del Covid-19 constatamos que la depresión por aislamiento es real) y la falta de productividad pueden tener consecuencias en las relaciones personales y el desempeño laboral.
Para contrarrestar el bed rotting, es importante establecer horarios específicos para el descanso y dedicar tiempo a actividades que promuevan el bienestar físico y mental, como el ejercicio, la meditación o la lectura (por supuesto, no en la cama). También es fundamental escuchar las señales que te manda tu cuerpo y no abusar del reposo, ya que esto puede llevar a una sensación de fatiga falsa y apatía. En resumen, mantener un equilibrio saludable entre el descanso y la actividad es clave para evitar los efectos negativos del bed rotting y promover una vida saludable y equilibrada.
Artículo publicado originalmente en GQ Francia.
