El proyecto del tren bala de California, destinado a conectar San Francisco con Los Ángeles, enfrenta dificultades financieras. Brian Kelly, CEO del proyecto, informó a los legisladores estatales que se necesitan otros US$100 mil millones para completar la ruta, lo que plantea interrogantes sobre la fecha de finalización.
Según Kelly, actualmente el proyecto cuenta con US$28.000’000.000, pero aún necesita varios miles de millones adicionales para completar la sección central entre Merced y Bakersfield. Esta parte del proyecto se espera que esté operativa entre 2030 y 2033, pero su finalización depende de la obtención de fondos federales.
Los líderes del proyecto estiman que se necesitarán US$100.000’000.000 adicionales para cumplir con la visión original de un tren bala que atraviese el estado de California. Sin embargo, aún no se ha establecido una línea de tiempo definitiva, ya que la autoridad espera obtener autorizaciones ambientales para los segmentos restantes.
Kelly destacó que han mantenido conversaciones con la administración del presidente Joe Biden para establecer un fondo ferroviario y que recientemente recibieron fondos a través del Bipartisan Infrastructure Act. También mencionó la posibilidad de asociaciones con el sector privado en áreas rentables como el área de la Bahía y Los Ángeles.
¿Cuáles son los desafíos financieros del proyecto del tren bala de California?
Las preocupaciones sobre la brecha de financiamiento fueron expresadas por senadores estatales de ambos partidos. KCRA consignó que el senador estatal demócrata Ben Allen señaló que una parte significativa de los fondos estatales destinados a reducir las emisiones de gases de efecto invernadero se destinan al proyecto. Mientras tanto, la senadora estatal republicana Kelly Seyarto expresó su preocupación por el impacto financiero del proyecto en el estado.
Ante estas preocupaciones, la senadora Kelly subrayó la necesidad de un mejor desempeño por parte del proyecto para ganar apoyo público. Comparó la situación con su experiencia en el proyecto del Puente de la Bahía, donde se enfrentaron desafíos similares pero finalmente se logró completar el proyecto.
La posibilidad de asociaciones con el sector privado está siendo considerada para áreas rentables del proyecto.
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A pesar de las dificultades financieras, Kelly se mostró optimista sobre las posibilidades de colaboración con el sector privado en áreas donde el proyecto podría ser rentable. Sin embargo, queda por verse cómo se resolverán las brechas de financiamiento y cuándo se completará finalmente el ambicioso proyecto del tren bala de California.
La incertidumbre sobre la fecha de finalización y los desafíos financieros pendientes plantean interrogantes sobre la viabilidad a largo plazo del proyecto y sus implicaciones para el transporte público en el estado. Los legisladores y funcionarios estatales continuarán supervisando de cerca el progreso del proyecto y explorando opciones para asegurar su finalización en el futuro cercano.
