El presidente de la nación le concedió clemencia a 11 personas que habían sido condenadas y que además cumplieron sus respectivas penas relacionadas con delitos de drogas considerados no violentos. Además, también les conmutó sus respectivas condenas a otros cinco ciudadanos.
Por el hecho de ser vistos como un ejemplo de superación para la sociedad, el demócrata de 81 años resultó benévolo con los siguientes ciudadanos:
Pilar Alejandra Yelicie-Rodríguez (Fairfax, Virginia)
Mujer de 48 años que se declaró culpable de un delito no violento de drogas.
Desde su puesta en libertad, ha mantenido un trabajo estable dedicándole su tiempo a su familia como voluntaria en su iglesia.
Stacy Lynn Wilder (Albany, Nueva York)
Mujer de 49 años quien aceptó su delito no violento ligado a las drogas.
Desde su puesta en libertad, ha trabajado como examinadora de nóminas y en funciones relacionadas en el gobierno estatal, obteniendo ascensos y comentarios positivos de sus supervisores. Además, proporciona ayuda a personas sin techo, veteranos y a animales.
Ricky Donnell Tyler (Columbia, Carolina del Sur)
Ciudadano de 54 años que condenado por delitos de drogas no violentos. Tenía 26 años en el momento de recibir sentencia.
Desde su puesta en libertad, obtuvo un permiso de conducir de clase A y gracias a ello pudo trabajar como conductor de camiones. En 2015, el Sr. Tyler comenzó su propio negocio.
Alexis Sutton (New Haven, Connecticut)
Mujer de 33 años declarada culpable de un delito no violento de drogas.
A partir de cumplir su condena ha tomado clases con la esperanza de obtener su título de enfermera. Además, participa activamente en su iglesia.
Glenn Ray Royal (San Antonio, Texas)
Ciudadano de 49 años que se declaró culpable de un delito no violento de drogas cometido a la edad de 20 años.
Desde su puesta en libertad, ha obtenido dos licenciaturas.
Actualmente, trabaja de forma estable en el campo de la tecnología de la información.
Katrina Polk (Washington, D.C.)
Mujer de 54 años que se declaró culpable de un delito no violento de drogas a la edad de 18 años.
Desde su puesta en libertad, amplió sus estudios hasta convertirse en doctorado en política y administración públicas.
Jesse Mosley (Ponchatoula, Luisiana)
Hombre de 42 años que se declaró culpable de delitos no violentos de drogas a la edad de 19.
Desde su puesta en libertad, creó una empresa y gestiona propiedades de alquiler, pues trabaja como agente inmobiliario.
Bobby Darrell Lowery (Jackson, Mississippi)
Individuo de 50 años condenado por un delito no violento de drogas a la edad de 25 años.
Desde su puesta en libertad ha mantenido un empleo estable y trabaja como voluntario en su iglesia, así como en varias organizaciones comunitarias.
Jeffrey Alan Lewis (Douglasville, Georgia)
Hombre de 58 años que se declaró culpable de un delito no violento de drogas a la edad de 40 años.
Desde su puesta en libertad, ha estado constantemente empleado, contribuye a la comunidad mediante obras de caridad.
Beverly Holcy (Palatka, Florida)
Mujer de 59 años que se declaró culpable de un delito no violento de drogas cometido a la edad de 27.
Desde que fue puesta en libertad, trabaja como empleada, es voluntaria en su iglesia y colabora en diversas actividades comunitarias.
Jason Hernández (McKinney, Texas)
Ciudadano de 47 años que fue condenado por varios delitos no violentos de drogas por una conducta que comenzó cuando aún era un menor.
Dirige una organización sin ánimo de lucro que transformó la tienda frente a la que solía vender drogas en un mercado donde se ofrecen alimentos de buena calidad y asequibles.
Cabe señalar que el presidente Biden también mostró ser generoso con otro grupo ciudadanos que cumplían condenas tras haber sido arrastrados por las drogas.
Daequon Charles Davis (Johnson City, Tennessee)
En 2017, fue encontrado culpable de conspirar para distribuir o poseer con intención de distribuir 280 gramos o más de cocaína.
Su pena era de 262 meses de prisión; 10 años de libertad supervisada.
Jophaney Hyppolite (Miami, Florida)
En 2013, fue encontrada culpable de conspirar para fabricar y poseer con intención de distribuir más de 280 gramos de cocaína base.
Por ello, fue sentencia a cadena perpetua.
Xavier Martez Parnell (Clarksville, Tennessee)
En 2012, fue encontrado culpable de conspiración para distribuir y poseer con intención de distribuir sustancias controladas, incluidos 500 gramos o más de cocaína, y 280 gramos o más de cocaína base.
Su pena era de 300 meses de prisión; 10 años de libertad supervisada.
Leshay Nicole Rhoton (Bristol, Tennessee)
En 2013, fue encontrado culpable de conspiración para poseer con la intención de distribuir 280 gramos o más de cocaína base y cinco kilogramos o más de cocaína.
Su pena era de 240 meses de prisión; 10 años de libertad supervisada.
Margaret Ann Vandyke (Ellenville, Nueva York)
En 2022, fue encontrada culpable de conspiración para poseer con intención de distribuir una sustancia controlada (cocaína crack).
Su pena era de 60 meses de prisión; tres años de libertad supervisada.
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