Un vehículo de la Patrulla Fronteriza desapareció brevemente el mes pasado de la estación de Imperial Beach de la agencia. Dentro del vehículo había un perro entrenado de la Patrulla Fronteriza, al menos un uniforme de un agente, tres armas de fuego y otro equipo de aplicación de la ley valuado en más de $105,000.
Cuando los oficiales de policía de San Diego detuvieron el vehículo robado unas cuatro horas más tarde, encontraron a Shawn Errol Farrar, de 34 años, quien no es un agente federal, al volante y vistiendo el uniforme, según una denuncia penal presentada en el tribunal federal de San Diego.
Los documentos judiciales muestran que es al menos la cuarta vez en los últimos dos años que Farrar, quien sirvió brevemente en el Cuerpo de Marines hace unos 15 años, presuntamente ha salido a dar un paseo en un vehículo gubernamental.
Los registros muestran que en al menos tres ocasiones en 2022, Farrar presuntamente robó vehículos de la Armada de bases militares locales. El presunto robo más reciente ocurrió la tarde del 29 de marzo en la Estación de la Patrulla Fronteriza de Imperial Beach, en Boundary Road cerca del Valle del Río Tijuana. Según la denuncia penal, un agente dejó un vehículo sin marcar en marcha en el estacionamiento seguro para proporcionar aire acondicionado a un perro dentro del vehículo.
En algún momento alrededor de las 4 p.m., Farrar ingresó al estacionamiento sin permiso y se llevó el vehículo, según la denuncia. Alrededor de las 7:30 de esa noche, los oficiales de policía de San Diego vieron el vehículo en el área de Mission Valley. El conductor inicialmente no se detuvo pero eventualmente lo hizo.
“Vine aquí, y me dieron este auto”, supuestamente les dijo a los oficiales, según la denuncia. Luego cambió su historia, diciéndoles a los oficiales que escaló una cerca para entrar en el estacionamiento de la estación.
Después de su arresto, Farrar les dijo a la policía que era un contratista privado con su propia firma de seguridad investigativa y que había conducido desde Imperial Beach hasta Camp Pendleton antes de regresar hacia el sur hacia Mission Valley, según la denuncia. También supuestamente contó una historia más elaborada y fantasiosa sobre cómo adquirió el vehículo, afirmando que un agente de la Patrulla Fronteriza lo dejó entrar por la puerta principal de la estación y le señaló hacia el vehículo esperando.
“Farrar también dijo que le dijeron que todo lo que necesitaba para completar su tarea estaba dentro del vehículo de la (Patrulla Fronteriza)”, escribió un agente de Investigaciones de Seguridad Nacional en la denuncia. “Farrar declaró que el vehículo decía ‘USM’ en él, lo que él creía que significaba ‘US Military’. Farrar declaró que solía trabajar para el ejército y por eso consiguió el uniforme que llevaba y por eso necesitaba ese auto.”
Un portavoz del Cuerpo de Marines confirmó el jueves que Farrar se alistó en marzo de 2008 y sirvió hasta abril de 2010. Dejó el servicio como soldado raso, E-1, el rango más bajo en el Cuerpo de Marines.
“La baja prematura y el rango en el momento de la baja son indicativos de que el carácter de su servicio era incongruente con las expectativas y normas del Cuerpo de Marines”, dijo el portavoz en un comunicado. “Debido a los procesos administrativos asociados, no se pueden divulgar más detalles”.
Farrar permaneció detenido el jueves en el Centro de Detención George Bailey en Otay Mesa bajo custodia federal, según los registros de la cárcel del Departamento del Alguacil. Los registros judiciales federales muestran que enfrenta un cargo por delito grave de robo de propiedad gubernamental, aunque aún no ha sido encausado.
En julio de 2022, Farrar presuntamente robó vehículos de la Armada en dos ocasiones separadas. No había detalles disponibles sobre el primer robo. Pero una denuncia penal presentada en el Tribunal Superior de Chula Vista mostró que a Farrar se le acusó de allanamiento de morada, vandalismo de más de $400, tomar y conducir ilegalmente un vehículo de la Armada y ocultar o retener un vehículo robado por incidentes ocurridos el 12 de julio.
Unas dos semanas después, Farrar presuntamente robó una camioneta Ford F350 de la Base Naval de Coronado y la condujo a una base militar diferente y no nombrada en la región. Según una citación presentada en el tribunal federal, un oficial de policía militar en la segunda base recibió una llamada de radio para responder a un estacionamiento donde un hombre afirmaba tener restos humanos.
Farrar mostró a los oficiales “una caja de huesos que afirmó haber encontrado”, según la citación. Los oficiales notificaron al Servicio de Investigación Criminal Naval y a una unidad similar de investigaciones del Cuerpo de Marines, pero escribieron en la citación que “nada sobre los huesos indicaba que fueran humanos”.
Luego, aproximadamente dos semanas más tarde, el 11 de agosto, Farrar presuntamente robó un Humvee de la Base Anfibia Naval de Coronado.
Los oficiales de policía vieron el Humvee robado unas 24 horas después de que fue tomado por primera vez, y los oficiales de San Diego y Chula Vista persiguieron brevemente el vehículo por las calles superficiales de South Bay y hacia el valle del río Otay, según la policía y FOX5 San Diego. Los oficiales arrestaron a Farrar bajo sospecha de robo de automóviles, no detenerse y por una orden de arresto activa por delito grave.
Mientras estaba sentado en el asiento trasero de un vehículo policial, Farrar le dijo a OnSceneTV que era un ex marine cuyo trabajo, en parte, había sido “penetrar bases con fines de seguridad”. Las imágenes de ese arresto mostraron una mochila de estilo militar adornada con un pin del Cuerpo de Marines y el apellido de Farrar escrito a mano con marcador.
Los registros proporcionados por el Cuerpo de Marines mostraron que Farrar era un empleado de almacén asignado a un regimiento de logística de combate en Camp Pendleton.
En relación con el Humvee robado, Farrar fue nuevamente acusado en el Tribunal Superior de Chula Vista, por cargos de gran robo de automóviles y evasión de un oficial con conducción imprudente. Su abogado designado por el tribunal de la Oficina del Defensor Público del condado declinó hacer comentarios el jueves. Farrar aún no tiene un abogado en el caso federal relacionado con el vehículo de la Patrulla Fronteriza.
