ATLANTA –
Un gran jurado acusó a un hombre de Georgia de asesinato por haber intentado agredir sexualmente a una estudiante de enfermería cuyo cuerpo fue encontrado cerca de una pista de atletismo en el campus de la Universidad de Georgia.
Es la primera vez que se revela tal motivo en el asesinato de Laken Hope Riley en febrero, que se ha convertido en un punto álgido en el debate nacional sobre la reforma migratoria. Los republicanos han utilizado el caso de asesinato contra José Ibarra, un ciudadano venezolano, para avivar los temores sobre la inmigración, afirmando que algunos inmigrantes cometerían crímenes violentos si se les permitiera ingresar a Estados Unidos.
Un gran jurado de Georgia emitió una acusación formal esta semana acusando a Ibarra de golpear repetidamente a Riley en la cabeza con una piedra, provocando que la asfixiara, y despojarla de su ropa con la intención de agredirla.
La acusación formal de 10 cargos también acusa a Ibarra de obstruir el intento de Riley de llamar al 911 y de alterar pruebas al ocultar la chaqueta y los guantes.
El asesinato conmocionó a los estudiantes y al personal de la universidad, que según la policía Ibarra no conocía a Riley y se quitó la vida en un ataque aparentemente aleatorio. Los agentes descubrieron el cuerpo de Riley, estudiante de la Facultad de Enfermería de la Universidad de Augusta, de 22 años, el 22 de febrero. Eso llevó a los agentes a concentrarse en un complejo de apartamentos cercano y finalmente arrestaron a Ibarra, de 26 años, que vivía en los apartamentos. .
“Fue un crimen de oportunidad en el que vio a un individuo y sucedieron cosas malas”, dijo el jefe de policía de la Universidad de Georgia, Jeff Clarke, poco después del asesinato.
En las semanas posteriores al asesinato, Riley se ha convertido en la cara de la reforma migratoria para muchos conservadores debido al estatus de Ybarra. Los funcionarios de inmigración dijeron que Ibarra ingresó ilegalmente a Estados Unidos en 2022 y se le permitió quedarse.
En el discurso sobre el Estado de la Unión de marzo, la representante estadounidense Marjorie Taylor Green (R-Ga.) le gritó al presidente Biden: “Di su nombre”. Luego, el presidente levantó un pin con el nombre de Riley y habló brevemente sobre el caso.
Los abogados de Ibarra no respondieron de inmediato a las solicitudes de comentarios el miércoles.
Martin escribe para Associated Press.
