Entre los eventos deportivos de la élite mundial, sin duda alguna se encuentra la Fórmula 1, que ha ido recuperando y ganando nuevos adeptos en los últimos años, gracias a la reveladora serie de Netflix: Drive to survive y a las modificaciones en la competencia que han convertido la F1 en un campeonato mucho más atractivo.
Y si hablamos de deporte en Estados Unidos, tenemos que referirnos automáticamente a Miami, quizás hoy una ciudad bandera por la cantidad de equipos tradicionales que hacen parte de su cultura, y principalmente, por la llegada de Lionel Messi al Inter Miami, que ha generado una revolución sin precedentes en el soccer.
Este fin de semana el turno es para la F1 en el Hard Rock Stadium, que hace meses albergó el Miami Open de tenis y por estos días congrega a lo más selecto del deporte y el entretenimiento entre viernes y domingo.
La experiencia F1 está compuesta de varios sectores. Lo primero que te encuentras una vez cruzar el puente que da acceso al estadio son los garages, donde las escuderías alistan los monoplazas para las diversas competencias. Esa hilera de garages conforman los pies. Cada uno está rotulado con las respectivas escuderías aunado a la imagen de sus pilotos y también sirven para el encuentro con los medios de comunicación de algunos pilotos, como Max Verstappen, que eligió ese lugar para la zona mixta con la prensa el jueves por la tarde.
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Ese “pit lane” puede ser recorrido por aficionados y periodistas una vez culmina la actividad del día viernes. Lugar ideal para tomar fotos y recorrer el sector de cada escudería. También es un momento muy emocionante porque puedes apreciar los monoplazas a una distancia muy cercana. Es sentirte en la pista y estar más cerca de la experiencia F1.
Antes de llegar al sector de boxes, está la entrada con la red carpet, en donde desfilan los invitados estelares de la carrera y verdaderos amantes de la velocidad. En estos primeros días se pudo observar a Tom Brady, Sergio Busquets, Ed Sheeran y el cantante puertorriqueño, Marc Anthony, quien será el encargado de cantar el himno de los Estados Unidos el domingo.
Luego hay otro sector muy interesante llamado “team village” , lugar lleno de carpas donde cada equipo tiene sus oficinas y que está ubicado dentro del estadio justo en el centro del campo. Allí hay lugares para comer y sectores para que cada equipo coordine sus estrategias. También allí hablaron la mayoría de los pilotos el jueves en la tarde entre 10 y 15 minutos. Por ejemplo, en el “team village” de Ferrari se juntaron Luis Suarez y Carlos Sainz para charlar un rato y aprovechar a hacer algunos “jueguitos”. Ese sector es exclusivo para la prensa y los invitados VIP y es muy común cruzarte a los pilotos en cualquier momento.
También está la sala de conferencia de prensa y los sectores de zona mixta, una para tv con derechos y otra para medios impresos. Los pilotos tienen la obligación de parar en cada una de ellas al finalizar la competencia.
Para los medios de comunicación hay un sector de prensa muy amplio y cómodo para poder trabajar, aunado a un amplio catering tanto para “snacks” como un restaurante donde se ofrecen las 3 comidas con un suculento menú. Ese lugar es donde funciona la discoteca LIV, los días en que juegan los Miami Dolphins de local.
Garantía de entretenimiento y diversión para los aficionados pese a los costos
Para los aficionados es un evento costoso pero inolvidable. El acceso a los 3 días a la recta principal tiene un costo cercano a los 7000 dólares. También hay entradas por día. Por ejemplo la entrada del viernes costaba 600 dólares, que daba acceso a las prácticas libres y a la clasificación del sprint del sábado, una nueva modalidad que se hará en 6 circuitos esta temporada y consiste en una carrera más corta, pero que también da puntos para el fin de semana a los 8 primeros pilotos.
Aparte de los distintas zonas para los aficionados (los de mayor poder adquisitivo van al Paddock Club) está el Fan Fest con diversas actividades para toda la familia, lugar ideal para esperar las horas previas a la carrera con una amplia oferta gastronómica y varios stands de reconocidas marcas.
También hay entradas de menor costo con acceso al estadio para observar la carrera en pantalla gigante y también sentirte parte de la experiencia F1.
La carrera transcurre entre 7 y 10 segundos por vuelta, pero todo los detalles descritos anteriormente son los que completan la fascinante experiencia de vivir una carrera de la Fórmula 1 en vivo. Esa es para siempre.
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