Por Gura García
La Fórmula 1 es uno de los deportes más caros en la actualidad al punto que para poner en contexto a la gente, una décima de segundo puede llegar a costar millones de dólares. El desarrollo tecnológico ha llevado a que los equipos de mecánicos e ingenieros en vez de tener boxes en las escuderías, pareciera más bien que tienen laboratorios en donde se busca que cada uno de los monoplazas rinda sus elementos de la mejor manera posible y lleguen a ser los mejores.
Eso, sin embargo, depende del presupuesto de cada escudería y de lo que necesiten para poder llegar a crear lo que pudiera ser visto como el automóvil perfecto. Recientemente se reveló cuánto costaría poder armar un monoplaza de la máxima categoría del automovilismo profesional y el monto en cuestión es multimillonario y es precisamente por ello que la presión es máxima para los novatos en los equipos y quienes hacen vida en la Fórmula 1, siempre y cuando no consigan buenos resultados.
¿Cómo funciona la creación del monoplaza?
Evidentemente hay partes del automóvil que son más caras que otras, como el moto y la caja de los cambios. Con un límite presupuestario anual de $145 millones de dólares para el mundo operativo de un equipo, sin añadir los sueldos de los pilotos y tampoco de los jefes de ingeniería. Las escuderías disponen de la cantidad de dinero antes mencionada para poder desarrollar de la mejor manera la temporada con cada uno de sus automóviles. No es nada más el fabricar el monoplaza, sino también hacer que el mismo pueda rendir de la mejor manera en las carreras y en las prácticas de pretemporada, los viernes en las prácticas libres donde se es habitual el probar varias puestas a punto y elementos del auto.
Para poder llegar a ese punto es de vital importancia el haber llevado al máximo los recursos en la construcción del monoplaza. De acuerdo con información del medio inglés The Sun, se elaboró un informe con los costos y se afirmó que un motor puede llegar a costar entre $6.2 y $18.6 millones de dólares. Conocido en la jerga de la Fórmula 1 como la unidad de potencia, la cual está compuesta de un impulsor a combustión y otro eléctrico, estos conforman la tecnología híbrida que hace una década llegó para quedarse.
El motor claramente es clave para el monoplaza no únicamente por ser el ‘corazón’ del automóvil, sino también por el hecho de haberse convertido en el tema más delicado ya que los extensos procesos de investigación, desarrollo y fabricación del mismo, aunado con los diversos materiales que se usan y las tecnologías de vanguardia, contribuyen en total para que el costo del mismo sea uno bastante alto.
El sistema híbrido constituye un punto vital ya que los mismos incluyen el Sistema de Recuperación de Energía (ERS) y la electrónica asociada, incorporan tecnología y componentes de última generación y es allí donde entra la gran inversión, el gasto de entre $620 mil a $2.4 millones de dólares.
Posteriormente continúa el monocasco o el chasis de fibra de carbono, un material que es utilizado en la Fórmula 1 desde el año 1981 con el que en aquel entonces fue el innovador McLaren MP4 y que se diferenció notablemente del resto por su resistencia y por ser bastante ligero. La estructura de un monoplaza es de enorme importancia para su mejor rendimiento sobre las pistas; el proceso del armado también es algo bastante complejo y complicado lo que lleva a costar entre $248 mil a $620 mil dólares.
Ahora llega el momento donde hacen aparición los componentes aerodinámicos algo bastante importante; este es el sistema que permite que el auto pueda ir lo más pegado al piso y de esta manera conseguir ganar mucha velocidad en cada una de las curvas del trazado. Lo aerodinámico cubre el diseño del auto y el desarrollo de componentes complejos como lo son los alerones, difusores y el bargeboards. También implica pruebas bastante exhaustivas en el túnel de viento, simulaciones de dinámicas de fluidos computacional y refinamiento progresivo y constante. Esto va desde los $62 mil dólares a los $248 mil dólares.
Finalmente se llega al punto de la caja de cambios que es otro de los componentes extremadamente importantes y bastante complejos a la vez; su trabajo es poder resistir una fuerza inmensa y transmitir a su vez una potencia máxima, de manera eficiente para poder conseguir la mejor conducción en las diferentes velocidades que pueda tener el monoplaza. Las cajas de cambios de la Fórmula 1 suelen ser construidas para poder afrontar lo que son los cambios rápidos de las velocidades y las detenciones, frenados extremos que se suelen presentar en las carreras, lo que requiere materiales de primera calidad y de alto rendimiento, mecanizado de precisión y un estricto control de calidad. Los valores de estos oscilan entre los $248 mil dólares y $620 mil dólares.
Repaso de los costos para el armado de un auto de Fórmula 1:
Motor: 6,2 y 18,6 millones de dólares.
Sistema híbrido: 620 mil a 2,4 millones de dólares.
Monocasco o chasis: 248 mil a 620 mil dólares.
Componentes aerodinámicos: 62 mil a 248 mil dólares.
Caja de cambios: 248 mil a 620 mil dólares.
Totales máximos: 22.488.000 millones de dólares.
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