Como parte del esfuerzo por aumentar el rendimiento del monoplaza para ayudar a adaptarse a las características de los nuevos motores turbo híbridos que cuentan con un reparto de potencia 50/50 entre el motor de combustión interna y la batería, los nuevos coches de Fórmula 1 van a tener en 2026 una aerodinámica activa o móvil.
La idea es que los alerones del coche puedan funcionar con una configuración de alta carga aerodinámica en las curvas para ayudar a proporcionar agarre, antes de cambiar a una configuración de baja carga aerodinámica en las rectas para ayudar a aumentar la velocidad en recta.
Uno de los caminos que se estaba explorando era que sólo el alerón trasero fuera móvil, ya que así podría funcionar fácilmente junto con el DRS y sería la solución menos complicada.
Sin embargo, algunos equipos han estado evaluando recientemente en simuladores lo que se conoce como el modelo básico de coche llamado “Fangio” para tratar de entender cómo funcionaría, y han surgido algunas características preocupantes.
Según las fuentes de Motorsport.com, cuando el alerón trasero estaba en su configuración de menor drag y el motor estaba a plena potencia, el coche era casi imposible de conducir, con múltiples ejemplos de pilotos que hacían trompos en las rectas al acelerar o que eran incapaces de tomar incluso la más fácil de las curvas sin que la parte trasera se saliera.
Eso se debía a un cambio en el equilibrio aerodinámico que se estimaba que era tres veces mayor que el que se experimenta actualmente cuando el DRS está abierto.
Una de las fuentes incluso llegó a sugerir que la única forma de evitar que los coches hicieran trompos era conducir de forma tan conservadora que los tiempos por vuelta acababan siendo más lentos que los de la Fórmula 2 actual.
Se sabe que representantes de la FIA han visitado recientemente las instalaciones de los equipos para comprender mejor lo que está pasando y lo que se puede aprender de los resultados de los simuladores.
Y fuentes de la FIA han revelado que se ha llegado a la conclusión de que el plan de aerodinámica móvil no funcionará si sólo el alerón trasero cambia de configuración.
Ahora, la FIA ha decidido que el plan aerodinámico de 2026 tendrá que incorporar tanto el alerón delantero como el trasero moviéndose conjuntamente para que los coches disfruten de las características de rendimiento esperadas.
Al garantizar que los dos alerones trabajen juntos, debería ayudar a reducir la desviación del equilibrio aerodinámico que ha estado generando problemas en el simulador.
Christian Horner, director de la escudería Red Bull, se mostró satisfecho de que la FIA haya escuchado las preocupaciones de los equipos.
El año pasado ya advirtió que existía el riesgo de que la F1 se quedara con “coches Frankenstein” debido a la forma en que las normas de chasis tenían que ajustarse a la elección de la unidad de potencia.
“Creo que ha habido una buena progresión”, dijo Horner ahora a Motorsport.com. Creo que la FIA ha tenido en cuenta algunos de los comentarios y se han hecho algunas modificaciones”.
“Estamos a la espera del reglamento de chasis, que será una parte fundamental del paquete de 2026, y de cómo interactúa con estas unidades de potencia”.
“Los diversos grupos de trabajo están trabajando duro en eso y es importante que concluyamos algo en un futuro próximo”.
Cuando le preguntaron si los resultados de los simuladores de los equipos habían sido motivo de preocupación, Horner dijo: “Al fin y al cabo, las reglas son las mismas para todos”.
“Así que, es cómo las aplicas y las traduces. No creo que nos asuste el reglamento, ya que es el mismo punto de partida para todos”.
“Cuando estén terminadas, sin duda descubriremos los problemas que puedan plantear, pero eso no difiere de cualquier otro cambio reglamentario”.
